Viviendo en Paz...
-¿Crees que ellos?
-Siendo de esa familia, desconfió por completo en ellos
-Te entiendo Dimi – sonriendo – solo quiero que Jacob esté a salvo
-Y lo estará – tomando la mano de su esposa para besar su dorso – te tengo un regalo
- ¿Eh? ¿regalo?
Dimitri saca una pequeña cajita y la abre dejando ver la hermosa gargantilla con un dije en forma de corazón tallado de un rubí, la joven queda en shock al verlo – es precioso…
-En cuanto lo vi pensé en ti – Adriana se sonroja de golpe
-Gracias Dimi – dando una sonrisa – ¿me lo colocas?
-Será un placer
Y así el hombre se coloca de pie y se acerca a la joven, hace a un lado el cabello de esta y le coloca la joya, para luego girar su rostro y besarla en los labios, la joven se sonroja de golpe.
-Dimi…
-Eres mi esposa – y Adriana da una sonrisa – así que espera todos estos tratos y hasta más
-Eres muy dulce Dimi, no merezco un marido como tú – y el hombre le responde con una sonrisa
-Tú y Jacob merecen lo mejor…por cierto te tengo otro regalo
- ¿Eh,