Sabrina interpretó automáticamente las palabras del hombre como que se preocupaba por ella, estaba a punto de hablar cuando oyó a un guardaespaldas que estaba en la puerta decir: —señor Borja, el señor Enrique está aquí.
¿Su segundo tío llegó?
Mirando fijamente a Cecilia: —Cecí, ¿no quieres averiguar quién mató a tu madre? No puedes entrar en la familia Spencer, así que, solo yo puedo ayudarte.
Cecilia dejó la cuchara: —Gracias por tus amables palabras, pero no.
Se levantó y se dirigió a la puerta justo cuando llegaba Enrique, —Perdón por las molestias, ahora me llevo a Sabrina.
Sabrina había accedido a volver a Aderedad y también había reservado un vuelo para pasado mañana temprano, dijo que quería despedirse de sus amigos de la Capital Imperial antes de volver, por eso le mandó a Fidel que le siguiera.
No esperaba que viniera a la Villa Midin.
No era necesario que viniera en persona a recogerla.
Cecilia se paró en la escalinata, formando una condescendiente confrontación con el hombr