Después de probarlo, Freya se dio cuenta de que estaba absolutamente delicioso. “Ryan, creo que eres increíble para encontrar restaurantes así de deliciosos. La base de sopa de hot pot de la última vez también estaba deliciosa…”.

“Crecí en Canberra. Nadie conoce Canberra más que yo. Si quieres, podemos encontrarnos para comer con frecuencia cuando tengamos tiempo”, dijo Ryan con una sonrisa. “Las comidas de la residencia oficial son buenas. Sin embargo, me siento tenso y cansado cada vez que miro la cara seria de mi papá durante las comidas”.

Freya se echó a reír. “Estás exagerando”.

En realidad, ella estaba de acuerdo con lo que dijo Ryan. Siempre tenía cuidado cada vez que comía con el Primer Ministro Snow.

“¿No lo sientes también?”. Ryan respondió en broma: “Cada vez que comes, te avergüenzas de comer más de la comida que te gusta por que la mueven más lejos de ti".

“...”.

Freya miró al hombre observador a su lado. Ella estaba asombrada. “¿Cómo... cómo sabes eso?”.

“También s