Capitulo 24
—Calma, Campeón. —le digo, me parecía tierno verlo tan relajado con sus amigos, que no puede contenerme: tomo su cara entre mis manos, su pequeña barba cosquillandome en las palmas, y lo beso olvidándome de todo lo que nos rodea.
Los silbidos no tardaron en retumbar en la oficina.
Me separo de él con una sonrisa.
—Creo que voy a vomitar.
—Cállate Matt. —su sonrisa lo delata—: Lamento eso, nena. No sabía que no pudieran comportarse.
Los dos chicos detrás de mi ríen a carcajadas.
—Creo que tengo que volver al trabajo.
—Seguro.
—A sido un placer, Señores.
—Igual, corazón. —dice Gideon que se queda sentado, pero en cambio Matt no. Viene a mí y vuelve a besarme en la mejilla.
—Cuidate y saluda a Susan de mi parte.
—Corta con eso Matt. —