— No me respondiste. ¿Dónde dormiste?
— Voy a cambiarme de ropa y te espero en la oficina.
Me di la vuelta hacia mi habitación, sabía que ella me seguiría, así que cerré la puerta con llave, me cambié la ropa de ayer y fui a la oficina. Entré y ella ya estaba allí. Me senté en el sillón, respiré hon