Capítulo 40
Era domingo por la mañana, Día del Padre. Noah acababa de dormir nuevamente, miré el reloj y vi que aún eran las cuatro y media de la mañana. Recordé el regalo que había comprado para Oliver y no lo entregaría personalmente, así que lo colgaría en la manija de la puerta de su cuarto. Sé que él se de