+Amelia+
—El amor es tan bello y a la vez peligroso, ¿verdad Emi? —y repentinamente Andrés me acorrala impidiendo que me vaya.
No puede ser, ayer tuve una noche difícil y ahora él quiere hacer bromas. Eso me pasa por no poner límites, quiero decirle que solo he venido por un café, ya que tengo micho trabajo y me urge mantener los ojos abiertos.
El ogro del jefe siempre me sorprende, ayer teníamos una plena conversación sobre nuestros hermanos, lo más confuso es que de repente cerró los ojos y fuuuufffff… Dio media vuelta y desapareció de mi vista. Intenté seguirlo, pero su amigo me detuvo y me pidió que lo dejara solo.
¿Hmmm?
El abogado es su mejor amigo, hasta ahora noté que vive en la misma casa.
Me sentí extraña, burlada y estúpida, con una media sonrisa di media vuelta y corrí a encerrarme a la habitación. Lo primero que hice al entrar es poner el seguro para luego lanzarme sobre la cama y cerrar los ojos.
Es un idiota, me dejó con la palabra en la boca.
—Andrés.
—No —negó con l