El tiempo avanzaba lentamente, el destino que les esperaba no era muy bueno. Afortunadamente para las brujas, crecieron con la idea que el destino podía cambiarse.
-¡Rápido Krow, ponte detrás de mi! -Pidió mientras liberaba sus brazos de la manta negra de su vestuario. Estaba preparándose para lanzar un hechizo. -¡Tenemos que salir de aquí lo antes posible!
-Vete tú si quieres. -Le respondió mientras su rostro comenzaba a transformarse mostrando más características de bestia. -Yo voy a pelear.
-¡No seas estúpido, esos lobos están bañados con el resplandor de la luna nueva, no se agotarán ni sufrirán heridas! -Inisistia desesperada para que su acompañante aceptara irse con ella.
-Yo se perfectamente los secretos de los hombres lobo. -Su soberbia se mantenía aún en ese momento en el que el peligro era inminente. -No necesitas explicarme lo que somos y todo lo que podemos hacer. Los voy a vencer sabiendo eso.
-Es muy noble y valiente todo lo que dices, pero yo te necesito con vida. Sin t