Miguel
Estoy en la cafetería tomándome un café, para tranquilizarme un poco por el altercado que tuve hace poco con el imbécil ese, está mañana, aún no he podido verla pensé que tenía posibilidades hoy pero ese pendejo lo arruinó todo.
Maldigo mi ego herido, porque debí disfrutar de su compañía el día que Henry me lo permitió, pero perdí la oportunidad de estar ese día a su lado, pero es que cuando la vi despertó mi ira y recordé todo lo que me hizo y no lo pude resistirlo, así que me fui y ahora estoy que muero de ganas de verla, no le he dicho nada a mis padres, lo sucedido con Brat y ella y no puedo hacerlo.
Si ellos se enteran no permitirán que estemos juntos, mi madre vive de las apariencias y del que dirán ella mexicana, pero provienen unas de las familias más adineradas de México, mi padre la conoció en una convención de socios y se enamoró de ella de inmediato.
Pero ella es muy superficial, mi padre es un poco más sencillo, él no se fija en esas tonterías y no discrimina a