Observo la cara de emoción que tiene Paulina, ella ha decidido que nos arreglaremos aquí en la casa de Stephen, para ella es más comodo y bueno, no me voy a negar. Solo tengo una duda ¿por qué tiene tanta ropa y tantas cosas aquí en la casa de Stephen? Obvio no le voy a preguntar pero me genera curiosidad, igual yo creo que en algun momento me puedo enterar.
- ¡Ya estamos listas! - Grita Paulina con emoción desde la habitación.
- Ya quiero verlas. - Dice Stephen mientras salimos de la habitación.
Los vestidos son iguales pero obvio en diferente color, el de Pau es negro y el mío es rosa pastel, consisten en dos piezas, un top y la falda, los tirantes son de pura pedreria y la falda es pegada pero con una abertura en la pierna izquierda, en la cual quedan muchas tiras de pedreria. Son simplemente hermosos y muy coquetos; al principio, Pau y yo discutimos por los colores pero después me gusto el rosa y me lo quede.
- Wow chicas. - Dice Stephen viendonos.
- ¿Te casarías con nosotras o no? - Dice Paulina coqueta.
- Sí, Jenny se ve muy hermosa. - Dice Stephen con burla.
- ¿Y yo qué? - Dice Pau fingiendo estar ofendida.
- Obvio tú también. - Responde y la abraza.
Uno de los hombres de Stephen entra a la sala y nos observa con seriedad, Stephen lo observa curioso.
- El señor que estaba esperando, ya llegó. - Avisa con seriedad.
- Que pase, por favor no lo tengan afuera. - Responde Stephen sonriendo.
Pulina y yo volteamos a vernos con curiosidad pero decidimos no decir nada. ¿Nos consiguio pareja? Volteo con curiosidad y veo a James entrando, yo sé que lo he dicho muchas veces pero se ve muy guapo, se ve tan elegante y con su cuerpo tan trabajado que ahhh.
- Hola preciosa. - Dice James y se acerca a darme un corto beso pero tierno.
- Hola cariño, no sabía que vendrías aquí. - Digo bastante nerviosa.
- Weyyy, su ropa. - Dice Paulina en mí oído.
Observo mejor a James y me percato de que viene vestido del mismo color que yo, su pantalon y su camisa son de color blanco, su saco, chaleco, corbata y pañuelo, son rosas. Me gusta mucho que su ropa quede a juego con la mia, me siento muy emocionada.
- James, tú traje. - Digo sonriendo como tonta.
- Sí, nos vamos a ver bien llegando juntos. - Dice regalandome una pequeña sonrisa.
- Bueno ya, mucho disque amor aquí pero ya debemos irnos, llegaremos tarde. - Dice Pau con burla.
- Yo me voy con Paulina y ustedes se van juntos. - Avisa Stephen sonriendo un poco.
- Bueno, entonces nos vemos allá. - Digo y ambos me sonrien.
Salimos de la casa de Stephen, James y yo estamos tomados de la mano, subo al auto de James que de inmediato se pone en marcha, creo que ninguno de los dos tiene algo por decir ¿qué vamos a decir? Estamos a poco de separarnos como acordamos.
- Jenny, realmente te ves hermosa. - Comenta James cuando estamos a punto de bajar del carro.
- Tranquilo James, no estamos con nadie y no es necesario fingir. - Digo regalandole una pequeña sonrisa.
- No estoy fingiendo, en realidad te ves hermosa.
Sin decir mas, ambos bajamos del carro y de inmediato nos llegan las voces y luces de los reporteros. James se acerca y toma mí mano, comenzamos a caminar pero como era de esperarse, no nos dejaron. La camioneta de Stephen llegó detras de nosotros y al parecer, los reporteros sí notaron que Pau y yo tenemos el mismo vestido.
- Jenny ¿qué puedes decirnos al respecto? Traen los mismos vestidos pero no los hemos visto en venta. - Dice un reportero.
- Es un nuevo proyecto, veo que son muy atentos. - Respondo sonriendo.
- ¿Cuando van a tener un hijo? Nos gustaría ver un mini Brook. - Dice una chica.
- Bueno, solo podrían ver fotos de James de pequeño. Sinceramente no tenemos planes de tener hijos. - Respondo con nervios.
Seguimos respondiendo más preguntas James y yo, volteo a ver a James con cara de fastidio y el detiene la ronda de preguntas para que podamos entrar al lugar. Al entrar veo a varios empresarios, algunos conocidos y otros que casi no conozco pero empresarios al final del día.
A lo lejos alcanzo a ver a la familia de James y sonrío, realmente me da un poco de tranquilidad que ellos se encuentren en este tipo de eventos.
- Tengo hambre. - Digo mientras caminamos.
- ¿No comiste con tu tan querido Stephen? - Pregunta James.
- No pude terminar la comida que me llevó, me dedique a arreglarme. - Respondo sonriendo.
- Pensé que me dirias que no es tú Stephen. - Dice mientras detiene nuestros pasos.
- ¿Por qué diria eso? No tengo la obligación de estar aclarandote este tipo de cosas, y la verdad es que no suena mal eso de "Mi Stephen".
James se ponde serio y niega con la cabeza, ambos seguimos caminando hacia la familia de James.
- ¡Cuñada! Te ves preciosa. - Dice Carol con emoción.
- Hola nena, gracias, tú también te ves preciosa. - Respondo abrazandola.