Erick Stoeber
Ésta chiquilla me está volviendo loco de todas las maneras. Si habría sido mía, ya la habría castigado como se lo merece. Sus ojos y esa boca... Esa maldita boca respondona me trae loco, pero sé que solo es un capricho. Es una nenita y es la hija de mi mejor amigo.
Ella me mira con rabia y su novio no es que le importe mucho.
—¿Qué pasa? —pregunta Marc entrando a nuestro campo de visión.
No me puedo callar, debo decir la verdad, además ese imbécil debe estar lejos de Ambert. Sé que sólo quiere aprovecharse de ella. Y la muy estúpida ni se entera.
—Pues que éste imbécil se estaba aprovechando de la chica —digo y ella se suelta de mi agarre.
—No es cierto, él es mi novio y tu ya lo conoces papá —dice tomando al idiota de la mano.
—Si lo conozco, pero esa no son formas de estar solos aquí arriba.