–Si, sobre todo–pongo los ojos en blanco.
El tierno beso de tayyar sobre mi cuello hace que mi cuerpo estremezca.
–Voy a castigarte–Susurra mientras ríe.
–Está bien, te doy permiso–Le dije clavando mis labios contra los suyos.
Las manos de tayyar empiezan a recorrer por todo mi cuerpo, cada tocada hace que me excite más y más.
Me quite el suéter por encima de mi cuello y de inmediato mis medianos melones se destaparon a la luz, la manera en como tayyar los miró fue demasiado, esos ojos verdes los analizaron con ansias parecía una hiena en busca de comida.
–Me encantan tus bubis amor–me halaga y eso hace que mis mejillas ardan.
Las sostiene dentro de sus manos y luego las acariciaba en círculos, ¡Que rico! ¡Qué rico! Sentir su tacto es maravilloso, es como si hiciera que mi mente viajará a otra dimensión.
–¿Te gusta?–me pregunta.
–Si, me encanta–exclamó llevando mis manos hacia sus hombros para apoyarme de estos.
Él me pide que me quite la sudadera y yo me la quitó con rapidez, mi pant