Sofía.
Al abrir los ojos esta mañana lo primero que veo son los pectorales bien formados de William disfruto de la vista y subo lentamente la mirada hasta su rostro que descansa plácidamente en la almohada jamás me cansaré de admirar ese rostro tan bello que cautivó mi atención desde el primer día, una leve sonrisa se dibuja en mis labios y acercó mi rostro a su pecho para sentir su calidez y tal vez dormir un poco más pero el sonido de la puerta siendo tocada me hace abrir los ojos con miedo y sorpresa haciendo que William se despierte de golpe el cual me cubre con las sábanas con rapidez.
-¿ Sofía ya estás despierta ?
La voz de la madre de William me llena de terror de que nos pueda sorprender de esta manera.
-sal de aquí.
Le susurro a William en el oído que se levanta con prisa y se comienza a vestí con rapidez para salir por la ventana mientras me coloco de nuevo el camisón antes de abrir la puerta y fingir que nada a pasado luciendo una sonrisa falsa.
-buenos días.
-buenos días