Sonia no pudo reaccionar.
Quizás fue por ese "cuñada", o quizás por el nombre "Miguel".
Miguel.
Entonces... ¿él era el... hijo ilegítimo que el padre de Andrés había tenido fuera del matrimonio?
¿Qué hacía aquí?
Innumerables pensamientos invadieron la mente de Sonia.
Hasta que el mayordomo se acercó —Señor Miguel, ¿qué hace usted aquí?
—Señor Miguel.
La sospecha de Sonia quedó confirmada, pero sus pensamientos se volvieron aún más confusos.
En este momento, ¿qué significaba que los Campos lo hubieran traído de vuelta?
¿Habían cambiado las circunstancias internas en CUMBRE?
Antes de que Sonia pudiera llegar a una conclusión, el mayordomo ya se había llevado a Miguel.
Antes de irse, él volvió a sonreírle.
El ceño de Sonia se frunció aún más.
Se quedó parada un momento más, y luego recordó que aún no había llamado a Andrés.
Él contestó rápidamente, pero al escuchar su voz, Sonia de repente no supo qué decir.
Andrés pareció impacientarse —¿Qué sucede?
—Estoy en la casa de los Campos.
Sonia