Capítulo 30
—¡Impresionante, impresionante! Qué sorprendente hallazgo. Realmente abre los ojos— se escucharon aplausos y grandes y efusivos elogios en la sala.

Este objeto también llamó la atención de Simón, quien dejó su comida a un lado y comenzó a investigar con su poderosa energía mental.

Mientras tanto, Rubén y otros presentes observaban el incensario con gran atención, sintiendo la misteriosa energía que emanaba de él, con expresiones serias y discretas en sus y cautelosas en sus rostros.

Finalmente, Rubén preguntó en voz baja a Abel: —Abel, ¡¿cómo planeas vender este objeto?!

Abel respondió con una sonrisa: —Voy a subastarlo. Se supone que este club es un excelente lugar para subastas en Valivaria.

Federico intervino: —Tiene razón, este lugar es muy conocido por sus subastas. Puedes dejárnoslo a nosotros.

Rubén preguntó: —¿Cuál será el precio inicial de la subasta?

Abel reflexionó por un momento y dijo pausadamente: —Para ser sincero, este objeto ya no me sirve para nada, pero para las pers
Sigue leyendo este libro gratis
Escanea el código para descargar la APP

Capítulos relacionados

Último capítulo

Explora y lee buenas novelas sin costo
Miles de novelas gratis en BueNovela. ¡Descarga y lee en cualquier momento!
Lee libros gratis en la app
Escanea el código para leer en la APP