Dicho esto, Simón le sonrió graciosamente a las chicas y luego se alejó en su camión, dejando la villa de Constanza atrás.
No sabía cómo sería la vida de aquellas dos madres e hijas en el futuro, pero tenía claro que él y Bastian, uno de los seis reyes, debían resolver sus asuntos.
Al fin y al cabo, Kolas había muerto a manos de Simón, y este asunto necesitaba llegar por fin a una conclusión.
La noche en Monteverde del Mar brillaba con luces...
Después de buscar por un buen rato, Simón finalmente encontró un parqueadero y estacionó su camión.
Sin embargo, justo cuando estaba a punto de salir del estacionamiento, una chica corriendo a toda prisa chocó contra él.
Con las extraordinarias habilidades de Simón, esquivar a la chica no debería haber sido un problema. Pero cuando intentó moverse a un lado, se dio cuenta de un tatuaje especial en ella que le llamó demasiado la atención...
Ese tatuaje era algo que había visto antes en Nemesio.
Mientras Simón estaba distraído observando embelesad