Después de quejarse de Jim en su mente, Bonnie no pudo evitar sentirse preocupada por Luna.

Ella miró a la niña que tenía delante.

Jim tenía razón. Luna era una persona que se preocupaba mucho por sus hijos, así que ella definitivamente se alteraría cada vez que viera a esta bebé.

Después de contemplarlo por un momento, Bonnie marcó el número de Gwen.

...

Luego de colgar la llamada telefónica con Bonnie, Jim se apoyó en el sofá y cerró los ojos.

No pudo evitar recordar el tono molesto de la voz de Bonnie a través del teléfono.

Él curvó los labios en una sonrisa. Él incluso podía imaginar cómo se veía Bonnie; su rostro se volvía rojo cada vez que ella se enfadaba.

Finalmente, él no pudo evitar soltar una risita.

Por alguna razón, esta mujer maleducada era de alguna manera bastante adorable cuando se enfadaba.

...

Luna permaneció en su habitación por dos días.

Durante estos dos días, aparte de comer, beber e ir al baño, ella estuvo acostada en su cama por el resto del tiempo,