Capitulo 3

Dasha

Ya han pasado 1 mes desde que vivo en la mansión, me he adaptado muy bien, desde mis dos insidentes con el alpha con poca ropa no lo he vuelto a ver de cerca, ya que casi todos los días quedo atontada cuando lo veo por la ventana, hay momentos que me siento observada y eso me pone nerviosa. Y lo que más me asusta es que me gusta la sensación.

Luna y yo hemos sido muy amigas, me a contado muchas cosas, me a regalado un hermoso vestido ya que hoy es la sucesión, hoy nuestro actual Alpha le pasará toda responsabilidad a su hijo, hoy Dylan será oficialmente el alpha de la máñana luz en la oscuridad.

Toda la manada estará presenté, Teresa me dijo que debo ayudar a repartir copas y aperitivos.

Me terminó de arreglar, no tardó mucho ya que no tengo mucho, solo polvo, rubor y labial que me regaló luna.

Estoy emocionada por qué veré a Mariana después de un mes, he chateado con ella por el teléfono de luna pero no es lo mismo la extraño.

*********

Esto está muy lleno, no sabía que había tanta gente en la manada, hay caras nuevas y como conocidas, muchos me miran mal, me dicen cosas que ignoro y otros solo me ignoran.

Paso por una de las mesas y siento una carcajada— Mira que chiquito es el mundo, la inútil ahora nos sirve a todos, una pobre sirvienta— Veo a una de las chicas que hizo mi vida un infierno. Alondra es la hija del mano derecha del ex alpha, es una de las mujeres más fuertes que han nacido, pero es demasiado cruel y mala.

— Señorita quiere una copa o seguiré mi camino—

— Mira que mansita me salió la sirvienta, cuando me casé con el alpha te haré mi esclava personal, tendrás que limpiar el piso por donde pase pero con tu lengua—

— Como se casará con el alpha si usted tiene mate y se comprometió—

— No debería decírtelo pero como hoy quiero hacer caridad, no entiendo como la diosa luna me pondría a mi. Un mate, tan débil y sin dinero como mantenerme, puedes creer, así que luego de conocer a Dylan, lo rechace para que podamos estar juntos, somos novios y pronto seré la señora Mercuri—

— No tienes corazón, el morirá por tu rechazo—

— Mejor pestes como los omegas no deberían existir, aunque tú eres peor ni a omega llegas, mujer sin lobo, cuando sea luna, luego de hacerte limpiar el piso que camino, te voy a desterrar y expulsar de mi manada— Todas sus amigas se burlan y yo me voy lo más deprisa que puedo.

Como existen seres tan podridos de alma, ella es la mujer que vi con Dylan en su habitación.

Voy por los pasillos, y tropiezo con alguien, cuando miro hacia arriba es Dylan.

— Señor disculpe venía distraída—

— Tranquila Dasha, puedo saber por qué llora— Dios mío qué voz.

— Señor no estoy llorando es solo que me callo algo en el ojo—

De repente se acerca y toma mi rostro con una delicadeza grandiosa, se acerca a chequear mi rostro y dejó de respirar, su aliento llega a mi rostro y dios bendito me va a dar un infartó.

— No gustan las mentiras, no te presionare para que me cuentes que sucede, pero mi madre siempre decía que las penas acompañados se pasan mejor— Toma mi mano y jala de mi, pasamos por la cocina y están tan metidos en sus trabajos que nadie se percata de nosotros, toma una botella de vino, dos copas y salimos hacia el jardín.

Caminamos un tramo y entramos a un jardín privado, hay rosas hermosas de distintos colores, una fuente y muchas luz, es un lugar hermoso y solo se accede con la llave que tenia Dylan.

Se sienta en una banca y yo lo sigo, ya que no a soltado mi mano y se siente tan bien que no quiero soltarme, pero el momento llega cuando me suelta para abrir la botella.

— Señor no debería estar en su fiesta, yo estaré bien no sé preocupe—

— Me siento mejor con su compañía que con toda esa gente queriendo caerme bien, pero es mi manada y debo atenderlos y no me digas Señor, soy Dylan no me hagas sentir viejo—

— Se- Dylan que lo hizo comprarme a mi, de todas las personas que estuvieron en la subasta—

Se queda pensativo— Hay muchas razones pero no te la diré quizás más adelante, pero te diré que una de esas tantas es que me hiciste acordar a alguien que fue especial para mí—

Quiero decirle que soy yo, pero quiero dejar el pasado atras, el es mi dueño y debo solo hacer mi trabajo.

Empezamos a tomar, luego de dos copas ya estoy un poco mareada y Dylan se ve radiante, en un momento estamos a una distancia segura, pero en un pestañear, le estoy demorando la boca, no sé cómo llegamos a esto pero la verdad me gusta, el sabor del vino en sus labios es adictivo, sus manos tocan mi espalda y me aprieta más a él, es mi primer beso y creo que besar a otro chico, siempre lo comprare con este beso.

Me Débora con hambre, yo soy una inexperta, pero mis labios parecen reconocerlo, no siento música, no me importa donde esté, lo único importante en estos momentos es que no nos dejemos de besar, cuando el aire ya no lo puedo seguir reteniendo nos separamos por oxigeno, no quiero abrir los ojos pero debo ser valiente, los ojos de Dylan están de un verde tan intenso que no parecen naturales.

— Lo siento yo— Me levanto rápidamente y corro, esto no debió suceder, el es mi jefe y prácticamente mi dueño..

Corro hasta que llegó a la cocina— Muchacha parece que has visto un fantasma, tengo rato buscando necesito que lleves estos aperitivos a la mesa central— Yo asiento coloco rápidamente todo para salir lo antes posible del lugar, Dylan entra al salón y Alondra se guinda de su brazo, cuando ella me ve, sonríe y lo besa, me quedó paralizada, se que ella es su pareja, pero hace menos de 10 minutos mis labios era los que estába besando, el no hace nada para alejarla, cuando terminan todo el mundo aplaude y ellos van a la mesa principal, salgo del lugar, no me siento traicionada por qué la culpable de nuestro beso fui yo.

Ese vino no me sentó nada bien, además todavía estoy mareada ya quiero que está fiesta termine para poder descansar.

*********

Ya todo a terminado, estoy terminando de limpiar cuando siento a alguien detrás de mi.

— Dasha podemos hablar—

— Lo escucho Señor—

— Volvemos con el señor, soy Dylan, sobre el beso—

— Tranquilo Señor ya yo lo olvidé, las copas me calleron mal nunca había bebido, me disculpo fui una pasada he irrespetuosa, no volverá a suceder, espero que me perdone, me retiro debo descansar—

Me alejo, no volteo la verdad, esto nunca debió suceder es lo mejor, Mariana no vino y me parece raro, cuando voy por la sala de estar, veo a mi amiga besándose apasionado con el chico que he visto siempre con Dylan.

— Mariana, que haces—

Ella se sobresalta— Dios Dasha me vas a matar de un infarto—

Suelta al chico aunque este gruñe y se acerca a mi y me abraza— Te he extrañado tanto, vine a esta fiesta por ti pero ha conseguido a mi mate, Lucas es mi mate—

Los ojos se me quieren salir, estoy feliz por ella, pero la pregunta es quien es Lucas.

— Hola Dasha te he visto mucho por aquí pero no he tenido la dicha de presentarme aunque mi hermana habla maravillas de ti, mucho gusto Lucas Mercuri—

— Dasha Williams, espero y hagas feliz a mi amiga— Veo acercarse a Dylan así que me despido.

— Los dejo en lo suyo, tú y yo debemos hablar mucho— Le digo a mi amiga.

Necesito mantenerme alejada de este hombre.

Leia este capítulo gratuitamente no aplicativo >

Capítulos relacionados

Último capítulo