CAPÍTULO 23| PERDERTE A TI MISMO

Heaven—Heaven, ya para. No estás nada bien —escucho decir a Ryder con la voz preocupada pero en estos momentos estaba demasiado mareada para entenderlo.Estoy tirada al lado de la mesa, con el sudor corriendo por mi frente mientras que mis piernas están sobre un banquillo de madera. Sobre éste se encuentran todos los sobres esparcidos de cocaína y heroína. Varios se ven abiertos mientras que otro aun están por usar.«Volví a caer y esta vez demasiado hondo»Los efectos de las drogas me tienen inestable, aturdida y mareada. Estaba tirada porque ni siquiera tenía las fuerzas como pa

CAPÍTULO 24| MALDITOS DEMONIOS

HeavenSalgo del auto de Nicola e intento sostenerme de la puerta esperando a que el castaño rodee el auto y me ayude. Cierro los ojos unos segundos, apoyada sobre el auto esperando que el piso deje de movoerse.«Parezco borracha»No sabía por qué me sentía mareada pero al parecer los efectos de la casi sobredosis aun no se habían ido por completo de mi cuerpo.—Te tengo, bonita —dice mi novio, rodeando mi cintura con sus brazos.Mis ojos se cerraban por momentos sin poder controlarlo y ardían tanto si los dejaba tanto tiempo abiertos. Se sentían tan cansados que sentía que en cualquier caería al suelo y dormiría para siempre.«Se sent&i

CAPÍTULO 25| TREN DESCARRILADO

HeavenCon esas palabras sentí como mi mundo empezaba a desmoronarse, cayendo con toda su fuerza hasta quedar en nada. Mi vida estaba yéndose a la mierda poco a poco y yo no me estaba dando cuenta. Como si lo que había sufrido anteriormente, no se comparaba en nada a lo que estaba sintiendo en estos momentos.«No, no, no»Mi madre, no.El frío de mi cuerpo no me ayuda en nada y los escalofríos hacen estragos en mi sistema, obligándome a arquear mi cuerpo cuando una sensación de vómito viene a mí.«Esto no está sucediendo»Recuerdos de mi madre vienen a mi mente como si fuese una película.Ella acariciando mis mejillas cuando veíamos nuestra serie favorita. Los momentos en que me abrazaba hasta quedarme dormida. Cuando lloraba por miedo a los truenos.Los días en que me l

CAPÍTULO 26| DESDE EL ANOCHECER HASTA EL AMANECER

NicolaSalgo de la casa de Heaven para dejarla hablar a solas con su padre. El señor Schmidt tenía que explicar y detallar específicamente todo lo nuevo que vendría a la vida de mi novia.«La vida de un mafioso era mucho más que dinero y lujos exurberantes»De ahora en adelante la seguridad de la castaña estaba mucho más cerca a ser perjudicada. La muerte de su madre fue sólo el primer paso para el castigo de Carter Schmidt y su linaje.«Más muertes están por venir»Camino hasta mi auto que se encuentra aparcado al frente de la casa y me subo a éste, ignorando las miradas de las personas del barrio.«A pesar de las

CAPÍTULO 27| EMPIEZA LA CACERÍA

HeavenUn mes ya ha pasado desde la muerte de mi madre y hoy es el día donde empezaré el primer paso de mi venganza.«No descansaría hasta cumplirla»Eran tres personas los que me pagarían todo este dolor que he estado sintiendo estos treinta malditos días.Hoy en la noche se celebraría el cumpleaños de Maximilian en uno de las discotecas más caras de Londres. Al parecer Vania le cumplía todos los caprichos a su hermano menor al obtener dinero suficiente para derrocharlo.«Asco me daba»La hija de puta estaba aprovechando el hecho de hacerse rica por estar ligada con los enemigos de mi padre.

CAPÍTULO 28| SE DECÍA QUE YO ERA MALVADA

CAPÍTULO 29| AL FINAL DE TODO

HeavenMi cuerpo se había desconectado de mi mente en el momento en que las palabras de Paige se repetían en mi cabeza a cada momento. La ira y el coraje estaban carcomiéndome la sangre de mis venas y no podía pensar en otra cosa que no sea matar a esa hija de puta que, desde hace varios años, no podía dejarme en paz.«Ni siquiera por todo el poder que me dió y que le di»Mis piernas se mueven en inercia de un lado a otro mientras tengo el teléfono pegado a mi oreja, hablando con mi padre. Reviso y analizo las armas que se encuentran en el lugar. En mi mente sólo analizo el plan que estoy por realizar.—Heaven, po

CAPÍTULO 30| INCENDIO EN LA LLUVIA

Heaven—Lo siento tanto —dice Paige, acariciando mi mejilla.Las dos estábamos echadas en mi cama y no he vuelto a salir de mi casa desde que esa noticia derrumbó mi corazón. Mi cabeza no dejaba de doler y la razón era porque no he dejado de llorar por nada. Cada vez que me calmaba, el recuerdo volvía y nuevamente las lagrimas caían.Han pasado dos semanas. Catorce días desde que perdí a mi bebé y cada día, el dolor se volvía más insoportable. No comía, no dormía bien. Hubieron noches es que me levantaba gritando pues tenía pesadillas sobre un bebé que desaparecía frente mis ojos.&n