Capítulo 54. Hacerle el amor
No había pasado ni quince minutos, desde que Alejandro, se había ido, cuando volvió a sonar el timbre de la casa de nuevo, ella como estaba perdida en sus pensamientos, no lo escucho la primera vez, hasta que volvió a sonar de nuevo y de inmediato se preguntó ¿quién será ahora?
Luego de hacerse esa pregunta, fue a la puerta y ver quién era, y apenas había abierto la puerta, se dio cuenta de que era Alejandro de nuevo. Ella de inmediato lo miró mal y le preguntó: ¿qué quieres ahora?
Y de inmediato volvió a decir, o se te olvido amenazarme con algo más.
Alejandro la hizo a un lado y entro sin esperar que ella le diera permiso. Luego de ya estar a dentro, le dijo: le prometí a mi hijo que hoy dormiría con él, pero como te lo trajiste sin decirme nada, me toco buscar tu dirección por todas partes, porque no le quiero incumplirle la primera promesa que le hice a mi hijo, así que, como vez hoy me quedaré a dormir aquí.
Kelaya solo se apretaba el puente de la nariz sin saber qué decir, y com