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Cafe contigo al despertar

Cafe contigo al despertar ES

Romántica
sheyla garcia  Completo
goodnovel16goodnovel
9.7
Reseñas insuficientes
21Capítulos
14.4Kleídos
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Resumen
Índice

Sinopsis

ArroganteAmorDramaMalentendidoOdiodificultades

María López, Abogada Dominicana de Veintisiete años, decide que no esta lista para casarse, su pareja Reed se llena de venganza y odio hacia ella y comienza a crear rumores sobre supuestos sobornos aceptados por María, sobornos de los cuales siquiera eran por parte del defendido por ella. Después de una discusión con los directivos del Buffet, María decide tomarse unas vacaciones a su tierra natal en víspera de Noche Buena.En el avión conoce a Julio Medina, un hombre de piel canela, ojos color Miel y mirada cautivadora, que recientemente había encontrado a su mujer siéndole infiel. Julio se interesa por María y le propone a una noche de sin compromisos. Ella después de todo, ya no esta prometida con nadie y decide aceptar la propuesta indecente.Julio es el cambio que ella necesita en su vida, un hombre tierno, atento, romántico y lo mas importante...AMA EL CAFÉ!¿Será que es muy tarde cuando María se da cuenta que el amor a primer café si existe?¿Aguantará Julio a que María se de cuenta que lo ama?Julio no esta en busca de algo pasajero, lo supo en el instante en que vio a esa mujer por primera vez. Debía hacerla suya, era perfecta para el.¿Dos almas se reconocen cuando se pertenecen? ¿Se habrá equivocado?Julio es un hombre seguro de lo que quiere, y a quien el quiere en su vida es a esa mujer tan incomprensible y con miedo a enamorarse.Café contigo al despertar es una novela que cautiva los sentidos de lector.Si eres amante al café y las pasiones....esta novela esta hecha para ti!!

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Cafe contigo al despertar Novelas Online Descarga gratuita de PDF

Último capítulo

  • Capítulo Veintiuno

    Bien, ya está hecho, me expuse tal cual soy y me siento.Es rubia… Vaya,tuve una buena imaginación al momento de idearla en mi cabeza. Sí, ella es rubia, de esas que dan hipo y quitan el aliento. Maldición, si me sentí hasta atraída por su cuerpo voluptuoso. No soy de esas mujeres que se pasan la vida acomplejadas, no. Cada quien tiene lo suyo. Todos nacemos con algo atractivo y que nos hace especiales. Aunque esa mujer y algunos cirujanos plásticos la hacen ver más que atrayente, la convierte en una seductora sin siquiera mover los labios pintados de rojo. Miro a Julio mientras él se levanta y camina de un lado a otro. Esta vez es él el nervioso pese a que su semblante y su espalda erguida demuestra lo contrario. Saqué todo de abajo para mantener mi ímpetu y mi orgullo maltrecho a raya. Al ver a esa mujer sobre Julio besándolo, algo primitivo en mí se despertó. Una cavernícola con mazo asomó a la superficie y me imaginé toda clase de escenario que incluían a una rubia despedazad

  • Capítulo Veinte

    —Parece que no tuviste mucho que esperar para sustituirme, Julio.La voz de María hace que Alexandra se despegue de mícon rapidez,aunque quizá no la suficiente.—María… —No me salen las palabras para decirle que por más cliché que suene lo que acaba de ver no es lo que realmente sucede.Maldita sea mi exmujer que siempre complica mi vida. ¿Acaso los ex no pueden alejarse con tranquilidad de la vida de uno? Alexandra siempre logra mover la tierra debajo de los pies de la gente, y no en el buen sentido. Ella se aprovechó de mí en un momento confuso que incluso ahora no logro adivinar qué quiere de mí. Parezco una damisela en apuros rogando el perdón por algo que no pude evitar que sucediera. Y vaya que me siento en apuros con la mirada enervada de María sobre mí. ¿Qué quería Alexandra al besarme? La mente de esa mujer es un maldito desastre. Entro las manos en los bolsillos del pantalón e intento controlar el ligero temblor que me produce Marícon un vestido blanco que l

  • Capítulo Diecinueve

    Mi maleta pesalo que una pluma. Me detengo en una tienda de camino a Punta Cana. Adam me prestó su carro, un Škoda Fabia color negro de 2012. Es bien cómodo y pequeño. Lo tiene en venta, pero como casamentero —quizás él no opine lo mismo— me lo prestó por unos días diciendo que no tenía nada planeado hasta dentro de unos días. El carro es de su difunta esposa. Ella, al morir,dejó todo para Adam. A él no le interesa, según me pareció, utilizar nada que le recuerde a su mujer muerta.«Comprensible».Camino por el lobby del hotel del padre de Julio y llego a la recepción. Tengo puesto un vestido negro discreto. Compré ropa para al menos tres días y varios bikinis por si mis planes se dan como espero, a menos que Julio hubiese pasado página, de modo que no tendré respuesta ni estoy preparada. Una negativa ahora que decidí darle una oportunidad a nuestra felicidad.Me cuesta siquiera pensar que lo perdí.«¡Solo han pasado unos pocos días!».Por primera vez, la voz

  • Capítulo Dieciocho

    El día llega con un resplandor cegador. Apago el aire acondicionado y me levanto de la cama. Es 28 de diciembre. Tengo tantas cosas de hacer hoy. Lo primero que hago es tomar el móvil y comprobar llamadas y mensajes en el correo. Nada, ninguna llamada. Escucho el sonido de un carro al estacionarse y apagarse. Miro por el ventanal; es un carro que no reconozco. Me ducho y cepillo los dientes con rapidez.Mi cabello solo necesita un poco de crema de peinar y lo dejo suelto con libertad de expresión. Para algo deben de servir las vacaciones del trabajo.«Y no peinarme es uno de los placeres de la vida».Me río ante este pensamiento y comienzo a buscar que ropa ponerme. Escojo una blusa roja cherry y unos pantalones cortos jeans azul royal. Mis sandalias ventiúnicasestán en una esquina. Me las calzo al salir de la habitación. Justo en ese momento, suena mi celular. Es una llamada de un número desconocido.—¿Sí?—María.Es Taurus, uno de los directivos del

  • Capítulo Diecisiete

    Las luces están apagadas y las calles desiertas, ya que hay una avería en la urbanización. Las casas y apartamentos con inversores tienen apenas la mitad de las bombillas encendidas.Al no saber a qué hora será reparada la electricidad, prefieren no gastar la energía del inversor. En nuestra casa reina el silencio. Sentada en la galería, contemplo el jardín de mi madre, el cual ha florecido esta mañana. Llena el lugar de color y olores fascinantes.Conjuntos de rosas se alzan una contra otra como si fuese una competencia de altura. En la galería tenemos una lámpara que adorna el techo, quizá no tan grande como las de la sala, pero sí lo suficiente para resaltar. Tengo en mi mano el celular, deseosa de saber de un hombre que no se ha molestado en ponerse en contacto conmigo. Han pasado cinco días desde que él dio por terminada nuestra aventura. Cada día me sienta peor, incluso cuando me tomo el café me quedo esperando a que baje por la escalera y llegue hasta la cocina con el p

  • Capítulo Dieciséis

    La vida apesta. Cuando crees que puedes ser feliz por un momento, todo se va por el escusado. ¿Cómo es que mi vida se volvióun etcétera de la noche a la mañana? El22 de diciembre tenía una relación vacía terminada y un prometido ambicioso que canceló nuestro futuro matrimonio. Tomé un maldito vuelo con destino a Punta Cana.¿Por qué no pude haber venido por el Internacional de las Américas? Vi a Julio irse, dejándome un sabor amargo en la boca y las ganas inequívocas de llorar por algo que acababa de perder, pero no lo amo,claro que no.Una de saber cuándo ama, ¿o no?Me manoteo las lágrimas ligeras que se desbordan por mis mejillas.Él es un cobarde. Julio Medina, sin conocerlo, se me metió no solo en mi cuerpo, sino también en mi piel, en mi pensamiento…en todo. Hasta mi manera de respirar es distinta estando a su lado. Con sufranquezame cambió el esquema de hombre protestosterona y que no habla de sus emociones. Julio dice lo que piensa, aunque no sea

  • Capítulo Quince

    JulioEl regreso a casa de María es rápido. Conduzco por la carretera Cibao-Capital a 70 km por hora. Escucho desde el IPod que conecté a la radio del carro mi playlist para viajes.¿En qué pensé cuando decidí venir? Cuatro horas perdidas parcialmente por algo que pudo haberse hecho por teléfono.«Sí, claro». El sarcasmo sale de lo recóndito de mi cerebro.Jamás habría accedido a ayudar a una mujer infiel, pero por una extraña razón confío en la palabra de esa hada rabiosa. Pamela es fuerte y valiente al haber dejado a un esposo maltratador.Ahora se ven más que antes los maltratos en los matrimonios. ¡Dios! Si hasta los novios se creen con el poder para golpear a sus parejas. El hecho de que Pamela confiara en alguien ya es mucho. Eso la hace valiente. Adrián, con su sentido de humor y despreocupación, le cree. Si él lo hace, yo le debo el voto de la duda.¿Benito gay? Ya veo que no todo lo que tiene bigote y bebe cerveza a pico de botel

  • Capítulo Catorce

    JulioElla me desconcierta.¿Cómo puede ser tan ciega? ¿Cómo es que no puede confiar en mí como para entregarme su corazón?No dudo de lo que ella me inspira.¿Cómo hacerlo? ¿Cómo no enamorarme de esos ojos marrones y esa figurilla de atleta con mucho culo?Lo que me hizo desearla, debo reconocer, no fue su físico.Antes me fijaba en qué tanta pierna tiene la mujer, cómo contonea las caderas al caminar, cómo se coloca una blusa una talla más pequeña para que sus senos se destaquen más y cómo se tiñen el cabello de colores llamativos, como rubio platino, rojo sangre o negro azabache. Tres tonos que destacan y llaman la atención de cualquiera. El color rojo en los labios y las pestañas postizas sumamente largas y tupidas. Sí, sé más que suficiente sobre el comportamiento de las mujeres para cautivar a un hombre.Sin embargo, la visión de esa mujer sentada en el asiento del aeropuerto, con ligeras lágrimas que corrían por sus

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21 chapters
Capitulo Uno
Cafe contigo al despertar /sheyla garcia
—¿Puedo sentarme? Mi asiento lo tiene una señora con su nieto. No he querido levantarla —me habla una voz masculina.—Sí,claro.El hombre de camisa azul de lino se sienta en silencio a mi lado.—Gracias. —Soltó el aire.Llevo más de dos horas esperando en el aeropuerto JFK de Queens al sureste de la ciudad de Nueva York. Un retraso en los vuelos me termina de dañar mi ya arruinada víspera de Nochebuena. Hoy,22 de diciembre, estoy oficialmente soltera. Botada y desechada como ropa diluida. Cuando pienso las cosas y cómo pudieron haber sido con Reed, mis ojos me traicionan y se dejan convencer por las putas lágrimas. Hace unas semanas era lo que se podría llamar feliz, amada —al menos desde la parte física—, exitosa y codiciada. Era una mujer realizada y envidiada. Yo, María López, con mis veintisiete años, tenía al hombre perfecto a mi lado, un trabajo en el buffet de abogado
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Capitulo Dos
Cafe contigo al despertar /sheyla garcia
—Aquí tiene, señorita —comenta la azafata al entregarme el trago y otro vaso con varios cubitos de hielo.Le sonríe a Julio.—Zorra —murmuroa la vez que intento disimularlo con una tos.La azafata, después de demostrar que tiene todo su potencial en las tetas y no en el cerebro, desiste de coquetear con el hombre a mi derecha y se marcha contoneando las caderas en exceso.Me dedico a mirar por la ventana para evitar soltar una palabrota y explicarle con cucharita a esa tonta que ese hombre no está en ella.Es una joven hermosa, tal cual buscan las aerolíneas en las azafatas.Rubia con presumibles extensiones de cabello, ojos cafés y boca en forma de corazón. Es atractiva y coqueta. Le debo el voto de apreciación.De repente, se oye la voz de la azafata detrás del altavoz.—Buenos días, señoras y señores. En nombre de Quisqueya Airlines, el comandante Josua y toda la tripulación, les damos la bienvenida a bordo de este vuelo con destino a Punta Cana, República
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Capitulo Tres
Cafe contigo al despertar /sheyla garcia
¿Había escuchado bien?—¿Cómo dices? —pregunto para cerciorarme de que el brandy no hizo de las suyas con mi cerebro. —No fue producto de tu imaginación —me confirma.¿Será que le habré dado una señal errónea a este espécimen de macho semental?Pienso en cada una de las preguntas y comentarios que nos hemos hecho en la última hora…Ningún indicio. La voz del brandy me habla para decirme que es la oportunidad de disfrutar sin complicaciones. Este hombre que me mira expectante solo quiere una noche conmigo. ¿Qué tan grave podrá ser considerar esta oferta?—Te propongo lo siguiente: te quedas conmigo en mi villa…—Detente ahí mismo —interrumpo su muy elaborado plan. Este hombre debe estar loco si piensa que voy a acostarme con él así sin más. Una hora en un avión y ya cree que me atrae.Ok, sí lo hace, pero no tenía porqué saberlo.—No va a gustarte si no me dej
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Capitulo Cuatro
Cafe contigo al despertar /sheyla garcia
—Perfecto. —Bebe el sorbo restante de su trago—. Vamos, nos espera Jonathan.—¿Quién? —Me levanto del asiento. El brandy se había apaciguado en mis venas y ya no me sentía tan mareada. Me comería el calzone al llegar al departamento de Julio. Julio... Este hombre me convierte en alguien que no soy,pero que deseo ser. Sus ojos recorren mi cuerpo con descaro. Me vuelvo a sonrojar, como colegiala en fiesta de graduación. Debo dejar de hacer eso. Sin embargo, es imposible mientras me observa como si quisiera desnudarme en medio del lugar.&
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Capitulo Cinco
Cafe contigo al despertar /sheyla garcia
La entrada a la vistosa mansión es en silencio con la sensación del inminente resultado. Acabaremos en la cama, envueltos entre sábanas, sudor, olor a sexo y placer absoluto. No dudo por un segundo que Julio podrá satisfacer cada fantasía o deseo que tenga.—Puedes dejar tus cosas… escasas cosas en la habitación para invitados.Suelta mi mano y camina hacia el segundo nivel. Me quedo de pie en medio del salón sin saber qué hacer. La calidez y seguridad que desprende Julio sigue siendo la misma que en el avión, pero algo cambió entre nosotros, quizá no es más que la tensión sexual que ocupa gran parte de mi cerebro en este momento. Contemplo el salón; todo en madera preciosa, la baldosa color crem
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Capitulo Seis
Cafe contigo al despertar /sheyla garcia
Huele a café. Me duele todo el cuerpo, más que todo mi satisfecho sexo, un recordatorio viviente de lo que fue mi noche con Julio. Fantástica. No tengo otra manera de describir cómo se preocupó porque yo alcanzase el placer primero que él. Solo pienso en los orgasmos que tuve anoche y se me eriza el cuerpo.Una noche fue suficiente para convertirme en una mujer diferente. «Una noche con un completo desconocido que besa como el diablo». Me remuevo en las sábanas y admiro la habitación. Parece más delicada que la típica alcoba de solteros. Es obvio que una mujer se ocupa de dar unos toques por aquí y por allí. Solo de pensar que alguien ponga sus manos en las sábanas donde Julio me hizo suya hace unas horas me llena de una rabia incongruente. «Fue una noche», me repito una y otra vez, aunque mi corazón me traiciona cuando lo veo entrar con dos tazas negras en la mano. Oh,¡café de mi corazón! Leer más
Capítulo siete
Cafe contigo al despertar /sheyla garcia
El pescado al coco es justo lo que recordaba; la masa blanda y fresca, crujiente por fuera y dorada, con unempanizado de harina de pan y con ligero sabor a coco gracias a la ralladura puesta antes de freír. Un plato típico de días de playa. No hay una sola playa del país donde no se ofrezca al público pescado frito. Disfrutamos del almuerzocon unas cervezas Corona.Escucho las anécdotas sobre cómo el papá de Julio construyó el hotel con apenas diez habitaciones gracias a unas tierras que su padre le dejó al morir de un paro cardíaco a los 51 años. Eso deja un pequeño temor en mí. Mi madre es joven aún, la vida puede esfumarse de entre los dedos con un chasquido. No sé qué será de mí si pierdo a las dos mujeres más importantes y constantes de mi existencia. Me es imposible no sentirme mal por Julio cuando, entre cervezas, me narra sobre su madre, el dolor que sintió y cómo se vio afectado al no tener una figura materna en su vida
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Capítulo 8
Cafe contigo al despertar /sheyla garcia
Caminamos a paso lento sobre la arena, mojados por el agua de la playa. Nos despedimos de la fantasía y el paraíso en donde nos pasamos horas compartiendo anécdotas y tomando cerveza. Extrañaré este lugar. El hecho de pensar regresar a hospedarme en el hotel dentro de algún tiempo me resulta dolorosa y desolador. Dentro de poco me iré a Santo Domingo. Es el más triste adiós que he tenido en la vida. No me he sentido tan angustiada desde que mi abuelo falleció. —Dejemos las cosas en el baúl —comenta.Me coloco el sobretodo.—Claro. Terminamos de acomodar las cosas y las cervezas.La brisa de las seis de la tarde enloquece a mi cerebro. Oscurece.El mar se ve inquieto y violento desde aquí. —Vamos adentro antes de que cojas una gripe y te veas obligada a quedarte conmigo. —Sonríe y abre la puerta del copiloto. —Qué más quisiera yo —suelto sin pensarlo.Cuando me percato de que esas palabras se escaparon de mis escu
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Capítulo 9
Cafe contigo al despertar /sheyla garcia
¿Cómo es que puedes entregarle tu alma a alguien que sabes que no te pertenece? ¿Cómo es que te sientes en tu hogar con alguien que apenas conoces? Preguntas y más preguntas rondan por mi cabeza mientras subo las escaleras.Después de sacar las toallas mojadas del maletero, me sentí acongojada, triste y desolada. Tuve sexo en un carro en medio de una carretera a mitad de la noche.¡Sexo en la calle! Le hice sexo oral a un hombre del cual me siento dueña y señora. Sé que no tenemos un futuro, solo unas horas del presente que se escapan de mis manos. Quiero llorar, pero no puedo. No puedo porque, si dejo que las lágrimas crucen por mis mejillas, no podré parar su fluir. Mi corazón se aprieta.Llego a la habitación de Julio y entro enel baño. Me doy una ducha rápida. Necesito salir de esta casa y de la vida de Julio de una vez por todas. Mientras seco las gotas de agua de mi cuerpo, pongo el celular en altavoz.—¿Se pued
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Capítulo Diez
Cafe contigo al despertar /sheyla garcia
—¿Quieres un trago, Jonathan?La voz de mi madre inunda la estancia. Mi abuela conversa con Julio sabrá Dios sobre qué.¡Claro que yo también no sé sobre qué!Las malditas miradas cargadas de burla y deseo en los ojos de Julio son irritantes. Mi abuela, en cambio, tiene esos ojos conocedores que adoran ver a su nieta casada y más con alguien que va tan bien vestido. Ella tiene buen ojo para la gente. Sé que Julio es un hombre encantador. «Maquiavélicamente encantador y arrogante».Puedo seguircon una lista eterna de apelativos y calificativos que harán desear golpearle la cabeza y hacerle recapacitar sobre su estadía en mi casa. —Claro —contesta Jonathan. Es un buen muchacho, eso aparenta, aunque esté aquí arruinando mi escapatoria de una noche del país y un magnífico día que a lo último dañó una de las tantas barreras que llevaba como capas de antibalas. Mi abuela se sienta con Julio en la sala de estar, comparte historias y
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