—¿Qué es lo que acabas de decir, padre? —Pregunto furioso delante de todos, pero él ni se inmuta y sigue hablando sobre su adorada prometida como si yo no existiera. —Te estoy haciendo una pregunta, Michael Roberts, contesta... —Esta vez, levanto más la voz, y entonces me mira, junto con los demás asistentes.
—Disculpen a mi hijo, parece que la noticia lo ha tomado por sorpresa... —Dice por el micrófono excusándose en mi nombre, y siento que la sangre en mi cuerpo hierve de ira, me acerco al escenario, por qué no pienso dejar que él y esa zorra que decía ser la mejor amiga de mi madre, se burlen de ella de esa manera. Cuando estoy por fin, frente a ellos, mi mirada es desviada hacia mi hermana, que de repente colapsa.
—Ava... Ava...
Subo rápidamente al escenario, pero mi padre es quien la toma en brazos.
—¿Estás contento?, ya alteraste a tu hermana con tu comportamiento infantil. —Me dice entre dientes.
—¿Yo?, pero si fuiste tú quien armó toda esta ridiculez, junto a es