Antenas, Grecia
Al día siguiente…
Una taza de café humeante de un lado y una de té de manzanilla en el otro lado, se encuentran sobre la mesa que separa dos cuerpos que parecen querer volver a encontrarse en la intimidad que les puede ofrecer las cuatro paredes de una habitación. Sin embargo, volver a tener esa clase de encuentro sería contraproducente, sobre todo, porque las personas en cuestión aún no identifican lo que siente.
Demitrius mira a la joven sin saber qué decirle o cómo explicarle que aún no es el momento. Es terca, no es una chica que simplemente acata órdenes. Él fue muy claro con ella, le dijo que descansara y que luego planificarían juntos su estadía en el país; no obstante, se negó a obedecerlo.
Ann está sentada con un vestido ejecutivo unos centímetros por encima de las rodillas. El color es un sutil tono amarillo, el cual combinó con unos zapatos beige. Su cabello está suelto a largo de la espalda baja y su rostro no refleja todas las horas de cansancio que v