~ MAITÊ ~
Las semanas pasaron en un torbellino de actividad y cambios. Marco y yo trabajábamos duro en ideas para el parque, reuniones constantes con arquitectos, diseñadores, especialistas en atracciones, consultores de seguridad. Cada día traía nuevas decisiones, nuevos desafíos, nuevos planes tomando forma. Era agotador pero también emocionante ver algo que había sido solo un sueño distante comenzar a materializarse en realidad concreta.
Mientras tanto, la vida continuaba pasando a nuestro alrededor. La hija de Nate y Anne había nacido, una niña linda y saludable que habían nombrado Avery. Y como si una hija no fuera suficiente para completar su felicidad, habían finalmente comenzado la fase final de adopción de un niño de tres años. Ver a Anne radiante con sus dos hijos, navegando la maternidad con aquella mezcla de caos y alegría, me llenaba de esperanza sobre mi propio futuro como madre.
Matteo, el primogénito de la nueva generación de Belluccis, había cumplido dos años, y la fi