CAPÍTULO 08
Ryan me mira con desconfianza. Aparto la mirada, ignorando todas las miradas que me lanza. Luego corre a su habitación.
Te amo, Jesús. Muchas gracias. Sigo siendo virgen.
Espera. Eso significa que no me besó aquella noche.
No sé por qué, pero eso me entristece un poco. ¿Pero por qué ? Ignoro todos mis pensamientos y voy a la habitación de Ryan, donde lo veo sentado en su cama, perdido en profundas reflexiones.
¿En qué estará pensando ?
Me acerco a él y me siento a su lado.
—Hey, sé que ya nos conocimos antes, pero presentémonos de nuevo y empecemos de cero. Quizá podríamos ser amigos.
Él me mira.
Vamos, pequeño. Sigue, vas por buen camino.
—Eh… ¿te gustan las galletas ? —pregunto.
Él sigue mirándome. Entonces saco una caja en la que la niñera puso algunas galletas para mí y se la tiendo.
Él observa las galletas por un momento, luego dice :
—Gracias, señorita Adams. Pero papá dijo que no aceptara nada de extraños.
¿Extraña ? ¿Yo ? ¿Acaba de llamarme extraña ?
—No soy una extraña. Soy tu niñera. Puedes tomarlas.
Él niega con la cabeza.
El hijo de papá.
—Está bien, si no quieres. Me las voy a comer yo —muerdo una galleta y gimo—. Hmm… están tan ricas.
Él me mira otra vez, luego observa las galletas.
—Déjame decirte que mi niñera hace las mejores galletas del mundo. Tú te lo pierdes.
Él baja de la cama y corre fuera de la habitación.
¿Por qué simplemente no puede hablar ? Tiene una voz tan angelical.
¡Odio a los niños tercos !
De todas formas, debería disfrutar de mis galletas si él no las quiere. Doy otro mordisco.
—Mmm… Niñera, eres la mejor.
Durante todo el día sigo explorando la casa. Muestra claramente una cosa : esta casa es increíble. Cada rincón respira riqueza.
Ya son las 19 :00 horas, estoy a punto de irme cuando noto una habitación.
¿Qué habrá ahí ? La habitación del señor Parker está arriba y su oficina por allá. No creo que esta habitación tenga algo que ver con el señor Parker.
La curiosidad me vence y no puedo resistirme. Me acerco a la puerta y golpeo varias veces, pero no obtengo respuesta del otro lado. Giro la perilla y casi abro la puerta cuando una voz suena detrás de mí.
—La curiosidad mató al gatito, señorita Adams.
Mi cuerpo se congela. Lentamente me doy la vuelta y veo al señor Parker de pie frente a mí, con las manos en los bolsillos de su pantalón. Me muerdo el labio. Pensaba que estaría enojado, pero su rostro es impasible. Empieza a caminar hacia mí, yo retrocedo. Seguimos así hasta que mi espalda choca contra la puerta. Luego apoya su mano junto a mí.
—¿Cuál era la regla número tres, señorita Adams ? —su rostro está extremadamente cerca del mío, me falta el aire. No logro responder. ¿Por qué ? Porque estoy más concentrada en lo cerca que estamos.
—Te hice una pregunta, señorita Adams —repite.
—Q-Que ciertas zonas están prohibidas en la casa y que no debo entrar en ellas.
—Parece que sí recuerdas las reglas. Esta habitación es una de esas zonas prohibidas. Así que la próxima vez, piensa antes de meterte en problemas.
Estoy cautivada por sus ojos. Tienen el color del mar. Ningún otro hombre me ha afectado tanto como el señor Parker. Me pongo nerviosa a su alrededor. No sé qué es, pero es un sentimiento diferente. Un sentimiento que nunca había sentido por nadie.
—¿Entendido ? —pregunta de nuevo.
Asiento con la cabeza.
—Sí.
—Bien —finalmente se aparta al notar la proximidad entre nosotros. Se aclara la garganta y dice— : Creo que deberías irte, señorita Adams.
Asiento.
—Llega a tiempo mañana.
¿Mañana ? ¡Maldición ! Olvidé que tengo la mudanza de la casa.
De hecho, mañana es domingo. Es mi día libre.
—Eh… señor Parker, mañana es domingo. Es mi día libre.
Me mira con el ceño fruncido, luego asiente indicándome que me vaya. Estoy a punto de salir cuando una pregunta cruza mi mente.
Nunca más.
Esta vez es en serio.
—Señor Parker, solo quería preguntarte algo.
Asiente, invitándome a continuar.
—Eh… sé que no es asunto mío, pero ¿podrías decirme por qué Ryan es así ?
—¿Así cómo ? —pregunta, desconcertado.
—Como si siempre estuviera solo. Sin amigos, nada. Intenté varias veces hablar con él, pero solo responde a mis preguntas con un asentimiento o con un « No, señorita Adams » y « Gracias, señorita Adams ». Y perdón por quejarme, señor Parker, pero le enseñaste muy malos modales.
Él levanta una ceja.
Sigo :
—Hoy le ofrecí unas galletas, pero me dijo « Gracias, señorita Adams, pero papá dijo que no aceptara nada de extraños » —imito la manera en que Ryan lo dijo.
—¿Y qué tiene de malo eso ? —pregunta.
—¿Qué tiene de malo ? Todo está mal. No soy una extraña. Soy su niñera, podría haber comido esas galletas, y sé que quería hacerlo, pero como tú le enseñaste eso, las rechazó y salió corriendo de la habitación. Deberías haberle dicho que no soy una extraña.
Él pone los ojos en blanco y dice :
—Está bien, le diré ahora que no eres una extraña. ¿Algo más ?
—Sí, ¿por qué es tan callado ?
—No lo sé. Está feliz cuando estoy con él. Y señorita Adams, eso no es de tu incumbencia. Sé perfectamente cómo cuidar a mi hijo. Puedes irte ahora —mira su reloj y añade— : Mi chófer te llevará. Ya es tarde.
—No, está bien, puedo arreglármelas.
—No fue una sugerencia. Te llevará.
Suspiro y asiento.
Él sube las escaleras, dejándome abajo.
¡Grosero !
¡Arrogante !
¡Idiota !
BELLA ADAMS
¡Por fin ! Todo está hecho. Hoy fue un día muy agitado.
—Todo está en su lugar, Bella. La casa es hermosa —dice la niñera.
—Sí, es perfecta —me acerco a ella y la abrazo—. Nuestra casa.
Ella me abraza de vuelta y me besa en la frente.
Hoy nos mudamos a nuestra nueva casa. Es realmente preciosa. Me encanta, y por la sonrisa de la niñera, sé que a ella también le gusta.
Voy a mi habitación y salto a la cama.
—¡Ah ! Te extrañé tanto, mi cama. Hace tanto que no duermo bien.
Nena, apenas son las 20 :00 horas. ¿Ya piensas dormir ?
¡Sí ! Necesito descansar. Mañana tengo trabajo.
Tu trabajo aburrido, quieres decir.
Sí, exactamente. Creo que si sigo trabajando ahí, voy a morir. Y créeme, seré la primera persona en el mundo en morir de silencio.
CAPÍTULO 09Yo también lo pienso. No estás acostumbrado a tanto silencio.Exactamente. Espero que al menos hable mañana.Quizás.De todas formas, ignorémoslo y durmamos.Con eso, me duermo.—Cállate, idiota —grito, tapándome las orejas con la almohada.—Cállate o te juro que te voy a romper —vuelvo a gritar.Bueno, si te lo preguntas, es la alarma. Esa idiota siempre me despierta temprano por la mañana.—¡Pff ! —finalmente me siento en la cama, despeinándome el cabello, y luego echo un vistazo a la alarma.—Vete al diablo, idiota.Me levanto de la cama y voy al baño. Mientras me cepillo los dientes y me doy un baño, me preparo para el trabajo. Al dirigirme hacia la cocina, veo a la niñera preparando el desayuno.—Buenos días —digo.Ella me mira con desconfianza y dice :—¿Por qué estás tan feliz hoy ?—Eh, no lo sé, pero siento la felicidad creciendo en mí —respondo con una sonrisa.—Eres un caso totalmente desesperado.Me río.—¿Qué has preparado para el desayuno ?—Sándwiches.—Enca
CAPÍTULO 10—Escucha, no quiero saber desde hace cuánto tiempo están juntos, y no me importa. Estoy aquí para hacer mi trabajo, así que por favor, vete —digo mientras retiro mi brazo que ella sostiene.Ella se burla y dice :—¿De verdad crees que no veo la forma en que lo miras ?¡Oh, dios ! ¿Es tan obvio ?Lo es.—Entonces déjà de seducirlo.Espera. ¿Seducir ? ¿Cuándo he hecho eso ?Belle, explota ahora. Vamos.—¿Seducir ? ¿Sabes siquiera lo que significa seducir ? Pues lo dudo. Al principio parecías bastante inteligente, pero ahora ya no puedo decir lo mismo. Eres solo una bimbo sin cerebro. Querida, eso no se llama seducir, se llama hablar decentemente —me dispongo a irme, pero entonces recuerdo algo. Retrocedo unos pasos hasta quedar frente a ella—. Y hablando de seducción, sentarte en el sofá recostada contra un hombre, con las manos vagando por su pecho, eso sí se llama seducir.Y sí, esa es exactamente la posición en la que está, recostada contra Liam.Espera, lo he llamado Lia
CAPÍTULO 11— Señorita Adams, siempre tengo planes de respaldo. Tienes que ser paciente. Te dije que había una cadena de planes —dice él con indiferencia, con las manos en los bolsillos de su sudadera.¡Oh ! Se me había olvidado eso.Pero en serio, este chico es realmente inteligente.— Tienes razón, señorita Adams, este plan tiene un 90 % de posibilidades de fallar, así que ya tengo otro preparado.— Adelante.— Plan número 2 —continúa.— Mhmm —digo, asintiendo con la cabeza.— Le dirás a papá que la odias, que te ha dicho un montón de cosas hirientes y que no es buena para mí, porque usa malas palabras, y eso no es bueno para mi futuro.Mis ojos se agrandan.¿Está bromeando ?¿Se refiere a mí ? ¿Como si fuera yo quien tuviera que decirle todo eso a Liam ?— Eh… Creo que te he oído mal. Supongo que dijiste María. Qué tonta soy al haber oído mi nombre —me río, esperando haber entendido mal. Rezando para que no sea yo.Me mira con una expresión seria.— No, señorita Adams. Oíste bien.
CAPÍTULO 12Es porque estoy ocupada examinándote.—Yo… lo siento, Liam —balbuceo.Este chico me pone supernerviosa. Me muerdo el labio y bajo la mirada.—Déjà de hacer eso.Lo miro, confundida.—¿Eh ?—Déjà de morderte el labio.Trago saliva con dificultad al escucharlo. Se ve tan intimidante. Da unos pasos hacia mí. Seguimos mirándonos el uno al otro. Aparta algunas mechas de mi cabello de mi rostro y las acomoda detrás de mi oreja. Cierro los ojos. Esta sensación es tan nueva y diferente. Sus caricias me hacen estremecer. Mi cuerpo nunca ha reaccionado así al contacto de nadie. Luego sus manos alcanzan mi mentón. Acerca su rostro al mío. Mis ojos siguen cerrados. Está a punto de besarme cuando alguien grita mi nombre :—¡ABEJA !Mis ojos se abren. Liam se aleja y se aclara la garganta mientras retrocede.Mal momento, Ryan.No sé por qué, pero me siento decepcionada.Miro detrás de Liam y veo a Ryan bajando corriendo con una gran sonrisa.Cuando llega, viene hacia mí y me abraza.—¡A
CAPÍTULO 13**Sacudo la cabeza diciendo “nada”.— Entonces, ¿por qué querías derramarle la bebida encima ?— Fue… e-e…— Te vi, y no fue un accidente. Lo habías planeado.— ¿Qué debería decir ?— Necesito que dejes al Sr. Parker.Me preparo para escapar por la derecha, pero me agarra de la mano y me aprieta contra la pared.— No te vas a ningún lado hasta que respondas mi pregunta.— Yo… no tengo nada que decir.¿Por qué está tan cerca ? Me pone nerviosa.— ¿De verdad ? ¿No tienes nada que decir ? ¿Quieres que te despida, Srta. Adams ?Mis ojos se abren de par en par, sacudo la cabeza.— Entonces respóndeme.— Yo… No es nada.— Estás mintiendo.Muy bien, él quiere saber. Se lo voy a decir.— Bien, quieres saber. La odio. La odio tanto.— ¿Por qué ?— Porque ayer discutimos —digo con voz enojada.— ¿Qué discusión ? —pregunta.¡PUAJ ! Este hombre es tan terco.— Después de que te fuiste, me dijo cosas feas. Quería que la bebida cayera sobre su cara irritante.— ¿Qué dijo ?— Que intenté
CAPÍTULO 14Sí, este chico tiene un buen cuarto de juegos. Pasa la mayor parte de su tiempo allí cuando yo no estoy. Cuando estoy aquí, me habla, jugamos, vemos películas y, además, le encanta escuchar historias. Así que por la tarde, le cuento historias mientras se queda dormido.Después de pasar un rato en el cuarto de juegos, finalmente regresamos a la sala. Veo a Liam sentado en el sofá, ocupado con algo en su teléfono, mientras Mia, al otro lado, le agarra el brazo y le dice algo. Cuando me ve, sonríe.¿Qué estará tramando esta perra ahora ?Seguramente algo malo.Entonces ella jala el brazo de Liam y lo gira hacia ella, de modo que ahora él está frente a ella. Parece confundido por su acción repentina. Ella lo agarra por la camisa y aprieta sus labios contra los suyos.¡Qué demonios ! Juro que la voy a matar.No quiero ver eso.Esa zorra besando a Liam.¡No !¡Mi corazón !Desvío la mirada y veo a Ryan observando con los ojos bien abiertos. Rápidamente cubro sus ojos con mis man
CAPÍTULO 15**— Di perdón a Mia — dice Liam.Ryan se queda en silencio y sigue sollozando.— Liam, ya está llorando. ¿Por qué eres así ? — dice Lea.— Sí. Liam lo dejó — dice el padre de Liam.Ignorándolos, Liam dice con la mandíbula apretada : — No pongas a prueba mi paciencia, Ryan. Solo di perdón.Ryan luego se da la vuelta hacia Mia, sin levantar la cabeza, y dice : — Lo siento, señorita White. Dicho esto, corre a su habitación, llorando.— ¡Ryan ! — lo llamo, pero no se detiene.Miro a Liam para verlo observar hacia donde Ryan acaba de ir, luego Liam me mira. Lo ignoro y subo las escaleras tras Ryan.**BELLA ADAMS**Cuando llego a su habitación, veo a Ryan acostado boca abajo sobre la cama, cubriéndose la cara y llorando.Me acerco a él y me siento en la cama a su lado. — Ryan — lo llamo suavemente.Es suficiente para que se reponga, se incorpora y me abraza llorando con todo su corazón. Paso mis manos por su cabeza. — Está bien, bebé. Está bien.— Papá nunca me había regañado an
CAPÍTULO 16**Entonces digo, mientras una idea me golpea la mente. “Espera. Regañaste a Ryan y yo estoy aquí para darte ideas. También estoy enojada porque regañaste a mi pequeño bebé. Ahora tienes que disculparte con dos personas.” Digo con tono enojado.Él me mira con el ceño fruncido. Antes de que pueda decir algo, me bajo del taburete. “Adiós, Sr. Parker.” Digo mirándolo fijamente, luego subo las escaleras.Estúpida Bella. Regañó a tu bebé y tú le hablaste amablemente.Me doy una bofetada en la parte de atrás de la cabeza.Al llegar a la habitación de Ryan, subo a la cama. Lo jalo hacia mí y me quedo dormida.Al día siguiente, me despierto al escuchar un golpe en la puerta. Abro los ojos y veo que Ryan sigue durmiendo a mi lado. Miro hacia la puerta y veo a María parada allí.Ella dice : “Hola, Bella.”“Hola.” Digo con voz adormilada, frotándome los ojos.Ella sonríe y dice : “Ambos se levantan rápido y bajan. El desayuno está listo.”Asiento con la cabeza y ella se va.Me levanto