Capitulo 10
Después de una noche entera llena de placer, Daliana se despertó sintiéndose envuelta en la calidez del perfecto y musculoso cuerpo de Andrew, Quien aún yacía dormido a su lado. A medida que sus ojos se acostumbraban a la luz suave y matutina que se filtraba por las cortinas, Su atención se centró en las cicatrices que adornaban la piel de él. Con delicadeza, Comenzó a acariciar esas marcas, Entendiendo el dolor por el que su ahora esposo había tenido que pasar. Las cicatrices eran un relato silencioso de torturas, Algunas visibles, Otras más recientes, Y cada una contaba una parte de la historia de Andrew, Una historia que a Daliana le dolía imaginar con vase a lo que Andrew le habia contado.
Con suma precaución, Decidió retirarse de la cama. No quería interrumpir su sueño plácido, Se levantó con cuidado, Caminando hacia la silla donde había dejado una manta la noche anterior. La tomó y la envolvió alrededor de su cuerpo, Sintiendo el suave tejido contra su piel. La sed la