Alexa se encontraba tomando una taza de chocolate frente a la ventana pensando si podría pasar las fiestas decembrinas junto a sus seres queridos y a pesar que se encontraba con Daniel su fiel y adorable compañero para toda la vida no dejaba de pensar en los demás.

Tocaron a la puerta y Alexa sin mucha emoción abrió pensando que se trataba de uno de los agentes, — Hola, ¿Cómo está?

— Detective Rodríguez, que bueno verle por aquí, pase, ¿Desea un poco de chocolate para calmar el frío?

— Pues como está vez no estoy haciéndole una visita apresurada y vengo a darle las buenas noticias en primer lugar a usted antes que a cualquier otro entonces me encantaría celebrar de esa manera.

— Vale— , fue por una taza y le sirvió el delicioso líquido colocando algunos pequeños malvaviscos lo que al policía le hizo sonreír.

— Gracias, luce delicioso, soy un hombre que le gusta ir al grano, así que no le daré más vueltas, tengo buenas noticias.

— Dígame que estoy ansiosa.

— Bien, todo ha terminado, la