Punto de vista de Liah

–¿Qué van a hacer? –pregunto con curiosidad.

–Voy a enfrentarlo, pero no lo puedo hacer solo –dice Bruno.

–Pero ¿cómo?

Nuevamente todos se miran, y esto ya está empezando a generarme malestar. No tengo dudas de que están tramando algo, pero sea lo que sea, me temo que es algo que no me va a gustar.

–Abel ha cometido demasiados delitos, está completamente desquiciado. Tengo pruebas de que tiene comprada a la policía, y tal como lo sospeché, tiene más tentáculos de los que en algún momento me pude imaginar –responde Bruno.

–Además, debemos hacer algo antes de que cometa el último crimen –dice Mateo con evidente preocupación.

–¿Cuál es ese?

Enseguida, Bruno me sostiene desde mis hombros y me mira fijamente, como si intentara controlar mi reacción después de lo que tiene por decir.

–Creemos que quiere matar a Lena.

–¿Qué? –pregunto incrédula –, no, es imposible. Antes de eso, nos mata a todos nosotros. Él está obsesionado con Lena.

–No, no lo está –responde Mateo