_ Generalmente los fantasmas no sienten este aire tan fresco, pero bueno, tú eres raro así que no me sorprende.
Nosotros permanecimos en la azotea por un buen rato y después bajamos al apartamento, ambos nos acostamos en mi cama entonces me quité mis lentes.
_ Amo tus ojos, gracias a ellos pudiste verme aunque no fuera con claridad.
_ Ahora puedo ver tu contorno, así que espero que pronto pueda verte con la claridad con la que miro a los demás fantasmas.
Kris se quedó callado y de repente gritó, no encontraba qué hacer, intenté tocarlo pero mis manos lo atravesaron, por algunos minutos desapareció completamente.
_ ¡Kris!
Sentía que me volvía loca al no verlo, ¿Qué ocurre? ¿Por qué está pasando esto? Iba a buscar a la señora Richards cuando él regresó.
_ Kris ¡¿Está