"¡Son un niño y una niña!". Anunció emocionada la enfermera mientras colocaba a los bebés sobre el pecho desnudo de Kiara porque el contacto directo piel a piel los calmaba.
Kiara no podía dejar de llorar mientras los miraba.
"Zane, son tan perfectos. Los amo tanto", murmuró y él rio entre lágrimas antes de depositarle un beso en la frente. Miró a los gemelos y su corazón se hinchó de amor y felicidad.
"¿Por qué no les damos espacio?", murmuró Anastasia con una sonrisa antes de volverse hacia el resto y hacerles una seña para que se reunieran afuera con ella. Heather no quería irse, pero todos sabían que Zane y Kiara necesitaban pasar un tiempo juntos después de lo que acababa de ocurrir.
Cuando las enfermeras y el doctor terminaron de limpiar, felicitaron a ambos antes de salir de la habitación.
"Estoy molesta, ¿por qué los dos se parecen a ti?", murmuró Kiara después de un rato de solo mirarlos y Zane rio suavemente.
"No estoy de acuerdo. Él se parece a ti con el color de pelo