Capitulo 5

Alicia Montes de Carbajal

-Mi Alicia finalmente obtendré de ti lo que deseo. Tú tía es muy buena negociando sabes ¿Cuándo se enteró de mis intenciones contigo? Acudió, para ofrecerme un trato –Mi tía Jaqueline me había vendido a este hombre por unos cuantos pesos.

¿Cómo pude ser tan ingenua para confiar en sus buenas intenciones conmigo? Nunca, fue buena incluso cuando era solo una niña indefensa. Menos ahora que represento una moneda de cambio para ella.

¡Dios mío como pude ser tan inocente! Con esa mujer.

-Usted manténgase lejos de mi ¡No voy a permitir que me toque! –Hablo elevando mi voz tratando de mantener mi calma.

Durante todo este tiempo ese hombre vivió detrás de mis pasos. Acaba de convertirme en viuda cuando decidió aparecer en mi vida. Con la excusa de ayudarme como un amigo. Fue mi tía quien lo trajo a mi vida y es ella quien insiste en mantenerlo cerca de nosotras.

-Alicia, ahora eres una viuda con dos pequeños por mantener que tiene de malo aceptar mis intenciones contigo. Puedo darte todo lo que desees preciosa.

¡Todo cuanto deseo es que mi esposo este conmigo! No, este tipo.

Maximiliano Carbajal

-Margot, sé que no entenderás mi petición. Pero necesito que te quedes con los niños mientras voy en busca de su madre.

-Max ¿Qué está sucediendo? Por favor confía en mí en esto, note el cambio en tú rostro cuando viste ese retrato, puedes decirme cualquier cosa sabes que para mí eres mi hermano aunque no llevemos la misma sangre…

-Es ella Margot… Es ella… ¡Mi Ali! –Mi amiga abre sus ojos con sorpresa para luego murmurar en voz baja –Digo con mi corazón acelerado por la emoción que finalmente la encontré.

Encontré a mi Ali después que tantos años.

-Imposible ¿Por qué termino casándose con Marcelo? Espera existe una razón ¡Oh Dios tú hermano usurpo tú identidad con Ali!

Aunque no quiero aceptar como un hecho sus palabras ella está en lo cierto mi pequeño hermano Marcelo, quien todo el tiempo me puso excusas del porque no encontraba a mi chica. Resulto convirtiéndose en su esposo.

Ahora entiendo sus negativas en ayudarme a encontrarla. Él se enamoró de ella igual que me sucedió a mi utilizo mi encuentro inicial con Ali para unir su vida a la suya. Por eso tenía tanta prisa en casarse con su novia de la universidad y vivir lejos de nosotros.

Mi hermano quería ocultar que me había robado el amor de Ali ¡Maldición Marcelo!

Debía salir en su búsqueda ¡Mi Ali! ¿Cuántos años tuvieron que pasar para encontrarnos de nuevo pero lo malo de esta situación es que dejo de ser la chica que conocí hace varios años. Ahora es la viuda de mi hermano y la madre de sus hijos.

Esos niños deberían ser mis hijos y ella mí esposa ¡No de mi hermano! ¡Qué mala jugada Marcelo! Si, estuvieras frente a mi te rompería la cara por robarme a mi mujer.

-Maximiliano, me quedare con los pequeños. Busca a su madre estaremos aquí aguardando su regreso. No, te preocupes estoy segura. Además si ella ha vivido en este lugar por tanto tiempo no debe ser tan malo. Y no me quedo completamente sola aquí está su niñera ella me acompañara hasta tú regreso.

Asiento abrazando a mi amiga antes de despedirme, pero no consigo salir con la suficiente velocidad que me propongo porque me detiene un pequeño niño que me estudia con atencion. Aun no conozco a su hermana según mi información recopilada sobre ellos son mellizos una niña y un niño. Y siento curiosidad pero hasta donde sé por su niñera una chica de dieciséis años. Mi sobrina duerme en este momento.

Al parecer es una pequeña perezosa en eso muy parecida a mi hermano Marcelo su padre. Solo recordar de quien son hijos en lugar de ser mis niños. Hace que mi estómago se retuerza.

Ellos debieron ser mis hijos no de Marcelo.

-Volveré pronto es una promesa. Solo voy por tú madre pequeño –El niño asiente manteniendo su mirada sobre mi rostro. Se muestra serio diferente a su actitud conmigo de un inicio.

-Tú, no eres mi papá no entiendo ¿Por qué eres idéntico a mi padre? –Me dice el pequeño hijo de mi hermano.

Claro, que me parezco a Marcelo existe una simple explicación es porque somos gemelos idénticos.

Alicia Montes de Carbajal

Jamás voy a permitir que este hombre entre en mi vida de ninguna manera. Me repito en mi interior mientras mis manos se vuelven puños por el coraje que estoy experimentando en este momento.

Ahora solo me importaba encontrar una manera para salir de este lugar poner distancia con este hombre que era obvio que no tenía buenas intenciones.

-Alicia ¿Por qué me rechazas conmigo puedes tener cuanto quieras? –Para lo que me importa su ofrecimiento.

Por años este hombre me había perseguido acosándome incluso cuando mi esposo vivía muchas veces quise hablarlo con mi esposo pero tenía miedo que se metiera en algún tipo de problema. Por eso permanecí callada soportando en silencio.

Fui una tonta…

-No, estoy interesada gracias por su propuesta. Sí, eso era todo es momento de retirarme. No, tengo más tiempo para perder con usted –Estoy por dirigirme a la puerta para salir de la habitación que con engaños fui traída cuando soy retenida por la fuerza por Fernando.

-No, perderé mi oportunidad contigo Alicia aceptaras mi propuesta por decisión propia o por las malas. Tú decides mi querida niña.

Luego de un tirón me arroja contra la cama aunque trato de resistirme a sus manos explorando mi cuerpo me resulta imposible librarme, él es más fuerte que Yo cuando se cansa de mi negativa tomas mis muñecas llevándolas sobre mi cabeza presionando con fuerza.

Estoy perdida…

Maximiliano Carbajal

Confirmo la dirección del lugar… para ser una reunión de trabajo como me dijo mi sobrino que asistiría su madre este no parecía apropiado, porque se trataba de un hotel de mala muerte. Observo con atencion el horrible lugar en busca de una señal de Ali pero nada.

-Señor Carbajal preguntare en dirección por su paradero –Me dice uno de los hombres que me acompañan asiento para dirigirnos juntos por información.

Pero una vez llegamos a recepción un rostro conocido atrae mi atencion es su tía sentada en un descastado sofá concentrada en su teléfono. Esa mujer me dirá donde se encuentra Alicia.

-Señora no esperaba encontrarnos en este lugar especialmente porque mi familia entrego mucho dinero que sería para mi cuñada y mis sobrinos del cual usted me debe una explicación, ahora que conozco la residencia actual de ellos.

La mujer parece sorprendida con mi presencia incluso parece nerviosa que está ocultando…

-¿Dónde se encuentra su sobrina señora vengo por ella?

-Mi sobrina está ocupada en una entrevista de trabajo debe esperar que termine…

-No, señora no voy a esperar, ahora mismo usted me dirá ¿Dónde se encuentra ella de lo contrario tendremos problemas? 

-Ella, está arriba en la habitación veinte… Pero, no entiendo esa actitud suya señor Carbajal…

-Vendrá con nosotros señora a buscarla. Si, miente le juro por lo más sagrado que tenga se arrepentirá de conocerme quedo claro –Ella, asiente dirigiendo el camino con pasos tambaleantes.

Al llegar donde nos indica la mujer, mi sangre se congela en mis venas al escuchar un grito proveniente del interior de la habitación. Seguido de su voz suplicando que no la toque a la que se une la de un hombre diciendo que no se resista.

Eso enciende el fuego en mis venas pateando la puerta hasta romperla consigo entrar para que mis ojos sean testigos de los eventos dentro de la habitación, sobre la cama se encuentra ella con un hombre sobre su cuerpo luchando por desnudarla ¡Infeliz!

Me dirijo hacia ellos tomando por el cuello de su camisa al bastardo arrogándolo con fuerza contra el piso para luego caerle a golpes sobre su rostro ¡Quiero matarlo por atreverse a intentar violarla!

Estoy perdido en mi intención de acabar con su vida cuando su voz asustada atrae mi atencion.

-Marcelo eres tú…  ¿Cómo es posible?

Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo