Lucas lo observó, desconcertado. ¿Qué intentaba decirle su nieto? ¿Acaso Dave le estaba advirtiendo que llegaría a odiarlo si seguía lastimando a Bianca? ¿Sabía Dave que lo que ocurrió la noche anterior había sido idea suya?
Lucas jamás olvidaría la manera en que Dave lo había mirado con tanta frialdad. Nunca le había temido a nadie, pero esa vez… sintió un pequeño destello de miedo.
Dave se parecía demasiado a él, y sabía que obligarlo a hacer algo solo traería consecuencias.
Últimamente, el Grupo Evans había recibido un golpe fuerte. Lucas no quería que las cosas empeoraran.
Y como Dave era el más capaz para liderar la empresa, no pensaba enfrentarse a él… mientras siguiera obedeciendo.
En cuanto a Bianca, Lucas no podía prometer dejarla en paz a menos que Dave realmente la soltara por completo.
—Está bien, pero tienes que entender que todo lo que hice fue por tu bien —le dijo Lucas—. Mientras coopere, no haré nada indebido. Como ya no tienes nada con Bianca, deberías casarte pro