Dave se preguntaba si su tío empezaba a sospechar que tenía una relación secreta… y si ya había descubierto que Bianca era la involucrada.
Parecía que debía mantener cierta distancia con ella por un tiempo.
Se frotó las sienes, sintiéndose inquieto. Podía mantener la calma en la mayoría de las situaciones, pero la frustración de no poder ver a Bianca lo atormentaba.
Esa tarde, tras terminar con sus tareas, Bianca miró la hora y se dio cuenta de que ya era tiempo de cenar.
Estaba emocionada por llamar a Dave.
—¡Hola! Ya terminé todo por hoy. ¿Tú sigues atrapado con horas extra? Si puedes salir antes, podríamos…
—Bianc —la interrumpió él con voz baja y tranquila.
Al escuchar su tono alegre, Dave sintió una punzada en el pecho.
Respondió con una serenidad forzada —Tengo que ir a casa de mi abuelo por unos días. Me llamó diciendo que no se sentía bien. Estoy preocupado, así que quiero acompañarlo un tiempo.
—¿Está bien tu abuelo? —preguntó Bianca, inmediatamente preocupada—. Deberías i