Lluvia una joven nómada y temeraria vive la vida de un lado a otro, termina en un pueblo no muy grande alejado de todo entre el basto bosque, solo que su gente se porta algo extraño y en su segunda noche hace lo que le advirtieron bajo ningún motivo hacer... salir de noche. Termina siendo testigo de algo que no debía ver, la trasformación de un hombre lobo y su pelea con una criatura de la oscuridad. Como el secreto de ellos corre peligro termina secuestrada y castigada, hasta que el líder de la manada encargada de cuidar el lugar, ordena dejarla vivir pero termina sirviéndoles. Lo que ellos no sabían es que ella se la vivía huyendo de algo igual o más peligroso que los lobos.
Leer másEstaba ansiosa por llegar, aunque las personas a las que les llegaba a comentar mi próximo paradero hacían una cara extraña, entre preocupación y miedo, me trataron de convencer de que había lugares turísticos mucho más atractivos que el pueblo 'Fog', un asentamiento tranquilo alejado de los disturbios y problemas de una gran ciudad y aún que me dijeron que era un lugar bellísimo de día, me advirtieron que bajo ningún motivo saliera de noche ni dejara las ventanas abiertas del lugar en donde me quedaría.
Me preguntaba por qué dijeron eso, sinceramente ese detalle me impulsó a querer visitarlo, mi gran curiosidad por ver con mis propios ojos que es lo que pasaba en ese lugar durante las noches fue demasiado, así que allá iba, en un taxi que me llevaría a esa mini cuidad mágica tan enigmática.Me permito deleitarme con el hermoso paisaje, los árboles están con sus hojas verdes radiantes mientras bailan al compás del viento, estábamos en pleno verano así que este lugar alejado de la ciudad era todo un paraíso, todo parecía indicar ser un lugar tranquilo así que probablemente me quedaría más tiempo del planeado.Era una joven nómada, no tenía hogar ni familia o algo así, mis padres murieron cuando estaba muy pequeña asi que apenas y los recuerdo, mi tía me adoptó, se hicieron cargo de mí ella y su esposo, aunque estoy eternamente agradecida que no me dejaron en un hogar temporal, para mí siempre fue muy obvio y notorio el trato diferente y en ocasiones excluyente que me daban.Al cumplir los 16 empecé a trabajar en una tienda alejada de casa, a ellos no les importaba mucho donde estaba o lo que hacía, no me prestaban atención, no eran muchas horas, pero iba todas las tardes al salir de la escuela.A los 18 años justo después de terminar la preparatoria ya tenía bastante dinero guardado, era muy buena para ahorrar, lo primero que hice fue abrir una cuenta en el banco, depositar gran parte del dinero e irme de casa de mis tíos, siempre tuve tantas ganas de conocer el mundo, recorrer muchos lugares hasta encontrar un sitio en donde deseara quedarme y establecerme, por el momento no a pasado y después de lo que viví no creía que fuera suceder jamás, eso se quedó siendo lo que era, un simple sueño.Llegamos al pueblo, estaba como una niña pequeña con ambas manos en el cristal del taxi observando el exterior, era un lugar encantador, varias tiendas, restaurantes... en verdad hermoso.Al estacionarse el auto en el hotel que iba a ser mi hogar en las próximas semanas salí de un brinco, el hombre abrió la cajuela para que tomara mi maleta de rueditas y mochila, eran todo lo que poseía, mi vida estaba dentro de esas dos bolsas, no tenía tantas cosas, solo lo necesario.— Muchas gracias.– Agradecí al hombre mientras le pagaba.— Bienvenida al pueblo,Ten cuidado, niña... disfruta de la ciudad durante el día, pero no salgas de noche bajo ninguna circunstancia...– Claro.Le sonreí amablemente, en el fondo estaba deseando que llegara la noche para ver que era lo que pasaba, por qué razón era tan peligroso salir de noche, no me asustaba ni me parecía aterrador, al contrario, creía que era interesante.Tomé mi mochila colgándola sobre mi hombro y jale mi maleta con llantas para entrar al lugar, me tomó solo unos minutos registrarme en recepción para después ir a mi habitación, que se encontraba en el tercer piso.Estaba encantada con mi habitación, no era muy grande ni lujosa, pero agradecía rotundamente tener un techo sobre mi cabeza, una cama individual al final, frente a ella una TV en una vieja cómoda, al lado de ella una puerta que es un pequeño baño con ducha por separado, del lado izquierdo justo al lado de la puerta se encontraba una cocina improvisada con una barra pequeña que dividía el espacio de la cocina y la cama, me encantó.Dejé mis cosas al lado de la cama y desempaque todo para guardarlo en la cómoda que se encontraba bajo la televisión, cuando terminé me fui a dar una ducha, para mi mala suerte el lugar no contaba con agua caliente, era raro el hotel que sí, era una suerte que estábamos en pleno verano y la temperatura fuera tan agradable para que un baño con agua fría no fuera una tortura.Al terminar me puse mi pantalón de pijama, estaba tan hambrienta, por suerte tenía provisiones en mi mochila por ese día... un par de sopas instantáneas y jugo de durazno, mi favorito.No me tomó mucho tiempo prepararme la cena, con mi plato me fui a la cama y encendí la televisión para ver una película, estaba una de fantasía, hombres lobo y vampiros.Cuando terminó la película me permití fantasear con la idea de que los hombres lobos existieran... sería muy loco, pero sin duda algo impresionante y no me parecía del todo irreal; por un pequeño orificio que tenía la cortina podía ver parte de la luna, pensando en la posibilidad de que existan cosas maravillosas, más seres de los que quizás ignoramos su existencia así como algunos que sabía que existían... tomé entre mis dedos la cruz del collar que colgaba de mi cuello.Apagué la televisión, fui a la cocina para lavar mi tazón y quedar completamente a oscuras... me senté en el viejo colchón cuya base de madera crujió ante mi peso; estaba a punto de dejar caer mi cabeza sobre la almohada cuando un ligero ruido del exterior llamó mi atención.Sin pensarlo hice a un lado la cortina, unas risas masculinas venían del exterior, me di cuenta de que ya muy al frente iba un grupo de 4 chicos caminando con total tranquilidad.Levanté una ceja al recordar todas esas personas que me dijeron que no saliera de noche, quizás eran solo supersticiones, alguien tuvo la mala suerte que le sucediera algo y eso explicaría el miedo de los demás, era lo único que se me ocurría.Miré alrededor, los edificios y casas cercanos estaban con cortinas y ventanas cerradas, lo cual me pareció extraño, ya que el clima era perfecto para dejar que la brisa nocturna se colara por la ventana para refrescar la habitación, lo que también llamó mi atención fue darme cuenta de que todo parecía estar en oscuridad, daba la impresión ser más tarde de lo que era, además de que se empezó a formar una espesa neblina, suponía que de ahí venía el nombre del pueblo.Después de pasear la mirada por los alrededores me disponía a meter mi cabeza curiosa que saqué por la ventana cuando casi se me sale el corazón del susto; un hombre parado al frente de mi edificio en el centro de la calle, me observaba fijamente mientras tenía sus manos dentro de sus pantalones.Su mirada era pesada y juraría que por alguna razón sus ojos parecían resplandecer ligeramente con la luz de la luna, era sin duda el hombre más grande que había visto, alto con una considerable musculatura que lo hacía ver tan intimidante.Pero sin importar su tamaño, complexión o lo que sea, era un hombre que me estaba estudiando sin disimulo alguno, era suficiente razón para temerle; como si hubiera visto a un fantasma metí la cabeza con rapidez y me escondí bajo las finas y viejas sábanas intentando dormirme lo más rápido posible.~~~~~~~Eran las 3 a.m. cuando un frío inexplicable me empezó a invadir de repente, cuando abrí ligeramente los ojos miré un par de puntos rojos y una sombra extraña, la sombra desapareció en un parpadeo...Sentí una ráfaga de viendo glasear golpeando con mi piel, me senté y noté como la cortina se movía por el viento nocturno que se colaba por la ventana, extrañamente está demasiado frío considerando la temporada en la que estamos, pero no le di gran importancia, solamente cerré la ventana y me arrope para seguir durmiendo.ExtraRexónLos pasillos de la casa están muy silenciosos y eso, eso, no es para nada buena señal, acabo de salir de una reunión con el consejo, ser rey es más atareado de lo que alguna vez llegue a imaginar, además estoy en preparativos para llevar a cabo Lluvia y yo nuestra boda número 5.Si, la quinta, me gusto esa celebración de los humanos, y digo... ¿Por qué limitarnos hacerla solo una vez? Cada año nos casamos de nuevo, le vuelvo a jurar amor eterno y renuevo uno que otro de mis votos.Salgo al jardín, me llevo instantáneamente la mano a la frente y cuento hasta 5 para relajarme, vuelvo a levantar la mirada, están dos adultos mirándome con los ojos muy abiertos, son Dan y Kurt, están cubiertos de lodo de pies a cabeza y si bajo la cabeza ahí están mi pequeño terremoto y tornado igual, con unas mangueras mojando a Dan y Kurt cubiertos de tierra.— ¡Papi!.- mi princesita y el demonio de Tasmania de mi hijo se acercan a donde yo estoy, se quedan parados enfrente a mí.— Papi, el t
Lluvia.El día no podía ser más bello y acorde al momento que estábamos a punto de celebrar, el tan esperado día de la coronación de los futuros reyes, Rexon y yo, este es un día que quedaría plasmado en la historia de los licántropos, ya que yo sería la primera reina humana que han tenido. Demostré estar a un nivel superior que una mismísima loba Alfa, ganándome le respeto y aprobación de quienes dudaban de mí.Estoy en mi habitación preparándome para el día más importante de mi vida, y lo significativo que tiene este momento no tiene nada que ver con la coronación, sino que también es el día de mi boda, el día en que me uniría al amor de mi vida. — Te ves hermosa. Nala está aquí conmigo en mi habitación admirando mi vestido de novia, la coronación a lo que me explicaran es solo una simple ceremonia en la que se nos entregarían a Rexon y a mi un collar significativo para la realeza, pero yo hice una modificación del evento para aprovechar la oportunidad y celebrar de una vez nuestr
Kurt. Cuando Lluvia regresó a la habitación donde estaba con los pequeños y me contó todo lo que había pasado no lo podía creer, me hubiera encantado estar ahí para ver, en especial el combate con Devora y podrá sonar un poco enfermo de mi parte, pero también me hubiera gustado contemplar como Lluvia la hizo perder el control y acabar ella misma con su propia mano. Pero enfocándonos en las buenas noticias, la coronación de Lluvia y Rexon será en tres días, consiguió la aprobación del consejo Alfa y la libertad de los renegados, esto no pudo salir mejor. — Sé que te dije que ya no tocaría más el tema, pero...- Lluvia evita mirarme, ya supongo a donde va esto de nuevo, estamos en su habitación, sentados en la cama observando a los bebés.— Hablé con Nala antes de venir aquí... ella como no tiene manada es parte de los renegados, al obtener libertad como ellos se marchará y... puede que no la vuelvas a ver nunca Kurt. Sus palabras me causan un escalofrío que me recorre todo el cuerpo y
Lluvia. Todos están sorprendidos por lo que dije, y no me pienso retractar, pero la que parece más conmocionada con todo esto es la misma Devora, su mirada y rostro reflejan la desesperación que está experimentando en su interior, se siente humillada, llena de vergüenza. — ¿Qué vas a hacerme? Tienes pensado torturarme antes de - escupe llena de molestia, pongo en blanco los ojos, limpio la sangre que tiene la daga en la manga de mi blusa. — Ya te dije que no soy igual a ti, tú eres una asesina yo no... — ¡Oh no! Se te olvida que el rey de los vampiros está en mejor mundo por tu mano.- la miro levantando una ceja. — Ya que tu cerebro parece no dar para mucho, te lo explicaré, yo no mate a Julienth por mero placer que eso es lo que hacen los asesinos, matar por placer o simplemente porque alguien no les agrada, lo hice porque él iba a matarme, era una amenaza. — ¡Yo también intenté matarte!.- su voz llena de odio hace eco en el lugar, al momento parece darse cuenta de su error, ac
Devora. Esto debe de ser una broma, no es posible que todo me salga mal, mis planes han estado perfectamente estructurados, pero siempre algún soplón o algo tiene que echarlo todo a perder. Ella tendría que estar muerta, pero sin embargo aquí esta, frente a mí, retándome en más de un sentido. ¿Cómo pueden preferirla a ella? ¿Cómo pueden aceptarla? ¿¡Por qué ella y no a mí? Desde pequeña siempre he obtenido lo que he querido, mi belleza y mi habilidad me han hecho merecedora de todo lo que deseo, pero desde la llegada de ella a mi maldita vida, todo lo que he querido no he podido obtenerlo, y ella sí. Me transformo en lobo con la esperanza desesperada de acabar con ella, ahora si no me cabe duda que estoy derrotada, seré condenada por mis actos en aquel dichoso juicio que se llevara en mi contra. Pero si voy a ser castigada por lo menos haré que valga la pena, y voy a hacer lo que debí haber hecho con mis propias manos hace tiempo. Acabar con esta humana. Me precipito en contr
Lluvia. Devora parece sorprendida de que la dejara expuesta delante de todos, no se toma el tiempo en ver a los demás, me mira fijamente y sonríe tratando de trasmitir una seguridad que claramente no tiene. — Estás alucinando cosas linda...— Tengo testigos. Además el renegado que le pediste secuestrarme esta aquí presente. Nala aparece por una de las puertas, no estaba con los otros tres renegados que entraron conmigo, las alarmas de Devora se detonan, como las cosas se están poniendo bastante tensas algunos guardias imperiales se acercan, rodeando la mesa, Rexon les lanza una mirada, estos se detienen a una distancia prudente. — ¡Eso es mentira! ¡Son calumnias en mi contra! Estás enojada conmigo solo porque siempre he estado en contra de que tomes el trono y con lo que propones con los renegados no haces más que dar la razón, no entiendes nada. Devora se pone de pie y grita fuera de sí, los demás se mantienen en calma, pero es evidente la rigidez de sus cuerpos. — Devora tiene
Último capítulo