El punto de vista de GabrielaMe quedé paralizada en mi sitio, mirando fijamente el anillo que tenía delante y con la mente hecha un lío. Esta propuesta era inesperada y, sin duda, había sido planeada por mi madre, ya que ella le había dado permiso a Miguel.«¿Quieres ser mi novia?». Esa pregunta resuena en mi cabeza y no sé qué responder, sobre todo porque estoy desconcertada por la propuesta de Miguel. Pensaba que íbamos a ser amigos. Solo amigos. Sin embargo, no sabía que mi amabilidad le haría encariñarse conmigo y no sé cómo voy a manejar eso. Sé que mi madre está emocionada, así que esbozo una sonrisa para evitar que sospeche que estoy dudando. Sé lo que tengo que hacer, pero ¿por qué siento que voy a hacerle daño? El silencio reinaba en la habitación, pero solo había una persona que nos dominaba. La ira silenciosa de Alejandro envolvía la habitación, aunque nadie lo notaba excepto yo. «¿Por qué no le respondes, Gabriella? Miguel está esperando tu respuesta», intervino mi ma
Leer más