El despertar de la Bella durmienteCapítulo 22Si decir que mi vida era un completo desastre para el mundo, en este momento era poco frente a lo que estaba viendo.¡Ja! Pero qué se puede esperar de estas dos familias, es como si un imán los uniera junto a la palabra caos. Y hoy, lo habían ratificado. Encontrarme metido en la delegación de policía junto a las dos familias más reconocidas de la ciudad por culpa de dos locos deschavetados era poco ¿no? Pues eso era lo que estaba pasando.Después de que Christian O'Connor y Aaron Connelly hicieran su espectáculo, que por cierto a mí me sacó risas y hasta canté junto con ellos. Dicha sea la verdad, yo no le vi nada del otro mundo, pero la policía pensaba distinto y quién era yo para estar en contra de ellos ¿no? Pero bueno, yendo al meollo del asunto y una vez que pudimos acreditar nuestras identidades y que nada teníamos que ver con el entuerto de esos dos, me pude llevar a la doctora Natasha y a la señorita Daria al hospital, dejando a lo

El despertar de la bella durmiente Capitulo 24Narrador Omnisciente - Creo que por hoy ha sido suficiente - les habla la doctora a ambos y ellos niegan como niños chiquitos. Además, después de lo que dijo Daria a Agustín, él comenzó a hablar como si una llave se hubiera abierto en sus pensamientos- . Me refiero a que tomes un descanso, Agustín. Esto es demasiada información en una sola sesión.- Perdón, doctora - respondió un tanto avergonzado.- Perdonado, pero ahora me toca a mí hablar.- Te escuchamos, Natasha - dice Daria acomodándose nuevamente en la cama en posición de loto, mientras Agustín se recuesta de lado, con una almohada entre las piernas.- En principio, todo lo que has relatado puede ser una proyección de lo que viviste hace unos días, pues tu relación con tu padre no es buena. - Pero eso que me dijo, estoy seguro, doctora que me lo dijo quién me secuestró-Agustín quería seguir hablando y Natasha no lo dejó, ya pasaban de las cuatro de la madrugada y ambos jóvenes a

El despertar de la bella durmiente Capitulo 26Narrador Omnisciente.- No puede acabar antes de empezar - decía el hombre a su esposa, si bien habían logrado su cometido y una suma exorbitante de dinero, no se sentía satisfecho, él sabía que podría lograr más.- Debiste pensarlo antes de tratarlo así, Mi hijo no es tonto y ya no es el niño manipulable que teníamos.- Podría haberse parecido a ese bastardo que te compraba todo, ni para eso sirvió.- Por favor, no sigas recriminándome más, ya he pagado y con creces ese error.- ¿Error? ¡error! Me obligaste a casarme contigo, tú sabías que mi familia no me dejaría abandonarte y te aprovechaste de eso.- ¡Ya basta! ¡Es suficiente, lo hice porque te amaba!- ¡Tú no sabes lo que es amar! Estás loca.El sonido de la cachetada inundó la habitación, eso era el colmo para esa mujer. Ella había hecho todo por y para él, pero él no lo veía. Ella sabía que amaba a otra, pero nunca supo de quién se trataba hasta el día de la cena, cuando vio a la

El despertar de la bella durmiente.Capítulo 28Narrador Omnisciente El funeral de las madres de Agustín y Lucienne fue sobrio, solo participaron los más cercanos, a los niños los habían dejado en casa con Glorita y el abuelo Agustín. el cortejo llegó al cementerio en completo silencio, no hubo discursos ni palabras para ellas, solo consuelo para Donovan, Mathew, Lucienne y Agustín.Del padre de Agustín se supo que había huido como la vil rata rastrera que era, pues "su amigo" lo estaba buscando para matarlo, era lo menos que le podría hacer a ese desgraciado cuando lo encontrara, después haber leído la carta que le dejó Sofía y enterarse de todo lo que habían hecho él y Ludovica. Por eso, a diferencia del cuerpo de Sofía, el de Ludovica, nadie lo había reclamado. Así fue como Donovan, en un acto de amabilidad con aquella chica que había acogido en su hogar, le pidió a Thomas que hiciera los arreglos para darle cristiana sepultura.Para todos, había sido complejo, pues hacia menos d

POR CLARA SANTILLÁNLo que pudo pasar y no fue...El día de hoy, estaba en la consulta de mi traumatólogo, sólo habían pasado unas semanas de mi accidente y gracias a toda la ayuda que recibí, podía decir que estaba viva, algo que al ver la cara del doctor Rubens, me hizo replantear si había sido lo mejor.Al final, lo que pasó fue que intenté esquivar a un camión que no redujo la velocidad, en la intersección para entrar la autopista y yo atiné a mover el volante, pero perdí el control de mi auto y desperté aquí. Por suerte no hubo más heridos o algún fallecido, solo yo que casi perdí mi brazo pues quedó atrapado entre los fierros retorcidos.Cuando desperté a la primera que vi fue a mi madre, ella estaba llorando junto a mi cama y golpeándose el pecho, de verdad que pensé que estaba muerta y que ella lloraba sobre mi cadáver, hasta que las manos de mi mejor amiga tocaron mi cabeza y la vi sonreír.-Por fin despertaste, mi colibrí.-Ro...-No hables, iré por los chicos.Desde ahí, ha