Leander.A pesar de que habíamos tenido un maravilloso encuentro con nuestra compañera, Near y yo seguíamos inquietos. No nos gustaba el hecho de que ocultara su naturaleza. Ella podía seguir haciendo sus hechizos, y estaba a nuestro lado, pero sentíamos que estaba lejos, colgando en un hilo muy fácil de romper. Y tener esa ansiedad no se sentía bien.Avanzamos con ella hasta la salida del aeropuerto, pero un oficial del lugar se paró frente a nosotros. Miré sus ojos, sentí el cuerpo de Dania estremecerse, y de inmediato Near comenzó a ir de un lado a otro en mi mente, ansioso.—¿Qué es este tipo? —gruñó.Por más que lo veía no podía descifrarlo. No era un brujo, un licántropo u hombre lobo, pero era especial. Y no uno bueno.—¿Ocurre algo señor oficial? —dijo en perfecto español mi mujer.El hombre que aún no quitaba la mirada de nosotros los Cox, dirigió su mirada a ella, a su cuello, donde gracias a su blusa en forma V se podía apreciar mi marca, y tuve que apretar mi agarre en su

Advertencia: contenido sensible.Territorio de la manada Diamond Moon.Alfa Calixto.He regresado de resolver un problema con un Omega en el ganadero de nuestro territorio, y de no ser porque el tipo es bueno en su trabajo, le habría arrancado los dos brazos, como se los arranqué a la bruja de Farrah, pues este ha estado robando nuestro ganado para venderlo ilegalmente a una pequeña manada vecina.Dentro de una hora debo partir a reunirme con el idiota de Alan, y necesito tranquilizarme. Mi lobo, ha estado muy silencioso, y comienza a incomodarme. Quizás una buena follada lo anime.Ahora puedo sentir los nervios de la Omega, Clara, cuando entra a mi habitación tras haberla solicitado.—Clara, ve al cajón y trae las esposas de plata —le ordeno.Los ojos de Clara se abren grande, puedo escuchar lo agitado de su corazón.Ella intenta dar un paso rápidamente fuera de mi habitación pero ¡sorpresa! Mi Beta le sonríe y la arrastra de nuevo frente a mí.—Alfa… —ruega, y disfruto del miedo en s

Territorio de la manada Golden Crescent.Alfa Oziel.Apenas salgo de la casa de la manada de Alan, camino hacia el bosque. Estando allí me quito la ropa para lanzársela a mi Gamma, pidiéndole que espere por mí.Ahora mi licántropo se pierde en el lado oeste del bosque, y admito que el desgraciado de Alan tiene grandes beneficios. Son extensas hectáreas de bosque en donde hay al menos cinco campamentos, así como espacios para la diversión de los cachorros; mientras que mi manada solo tiene tres campamentos, uno para los altos rangos, uno para los Guerreros y otro para enseñar a cada lobo o licántropo a pelear.Nuestra única ventaja es que tenemos una playa, y al menos los cachorros se distraen en ella.Mientras Lie se sube a un árbol inmenso, que nos deja ver la inmensidad del territorio de Alan, quiero seguir pensando en las reuniones, en nuestra misión con la bruja elegida, pero es absurdo.Todos mis pensamientos en estos últimos días paran siempre en ella. Esther. Y su rechazo que n

Territorio de la manada Diamond Moon.Narrador.En el camino en la SUV, Oziel y Lie no dejan de fantasear con la idea de tener a Esther como su compañera; se la imagen jugando con Abbie, lo mucho que se amarían, las risas que volverían a llenar de vida la casa. La imagina siendo querida por todos los integrantes de la manada, siendo una Luna silenciosa pero tan bondadosa. Eso es lo que ve en ella, la bondad, pero le encantaría poder conocerla mucho más. Y también le encantaría que ella se diera la oportunidad de conocerlo, para que vea que su ambición no es lo único que lo caracteriza.Pero entre tantos pensamientos felices, uno oscuro destaca, y es en el hecho de que si llevan sus planes a cabo con éxito, y Esther no lo acepta como compañero, es probable que ella apoye hasta el final a Alan, y a Lavinia. Por lo que, siendo parte de la manada enemiga, deberán doblegarlos, y esa idea, lo hace erizar. No quiere hacerle daño, y necesita buscar la forma de protegerla antes de que todo expl

Adriel Cox.Raid comienza a ocultarse en el fondo de mi mente al no querer ver cómo piloto. Porque aunque parezca mentira, le tiene miedo a las alturas.—Raid necesito sentirme seguro. No te escondas —juego con él.—Sabes que no me necesitas. ¿Y qué más seguro puedes estar? Tienes un padre, hermano y cuñada con súper poderes.Esto me hace reír, porque él siempre bromea con lo poco especial que somos, aunque sabe que no es así. Como humano tengo la habilidad de hacer o solucionar cualquier cosa sin necesidad de esforzarme tanto, porque aprendo rápido. Y aunque mi padre no lo sabe, durante el tiempo en que estuve en otros países buscando a la bruja elegida, conocí a algunos renegados que me hablaron sobre nuestro mundo, y las estrategias de sus Guerreros, así que tanto Raid como yo sabemos pelear muy bien.Consigo un rápido manual de aviación en el teléfono, y antes de ponernos a despegar hablo con Dania sobre las precauciones, entonces escondo muy bien el objeto en mi mochila, temiendo