POV DE SOPHÍA FERRER Mi mundo de repente se ha puesto patas arriba, todo fue muy bien planeado. Estaba en sus manos mi futuro y no tenía ninguna escapatoria. Había quedado a merced de un mafioso sin escrúpulos, una familia cruel y vil.Acaso podré someterme a ellos, seré capaz de vivir bajo sus órdenes?La respuesta aún no la sabia, pero dudo que pueda vivir en el mismo techo que Dante Moretti y su padre. Para lo único que podría estar preparada era para vivir mi peor pesadilla. —Solo firma hija. No me hagas tomar decisiones drásticas, Sophía— mi padre me sigue insistiendo, la presión que siento ahora mismo es demasiado. Mi hermana Valentina y Victoria salen de prisa cuando papá le hace una señal, ahi es cuando siento que esto se va a alargar. El bolígrafo en mis manos demuestra cada una de mis dudas y frustraciones. Dejo caer el bolígrafo con un golpe seco sobre la mesa y me dirijo a mi padre.—Dije que lo haré, pero necesito

Media hora después de buscar hasta donde no se podía, me relajo ,seguro es un acosador que quiere asustarme. Aquí estoy segura, pero sera mejo que compruebe que en realidad estoy a salvo.Al observar bien no era un lugar que hubiera estado cerrado por años como imaginaba, sino un espacio que, a pesar de no haberlo vivido, parecía tener algo de familiaridad. Mi padre al parecer lo ha mantenido limpio y ordenado. Y además es seguro hasta ahora.El departamento es muy hermoso y amplio para que yo viva sola en él. Tiene una gran sala de estar amueblada con dos sofás color gris, una mesa de centro de cristal, y la cocina es muy funcional con un diseño muy moderno y elegante. Las habitaciones eran espaciosas. Las paredes tenían colores neutros sin demasiada decoración, era mínima pero muy bien organizado.Me da nostalgia al saber que mi madre lo decoró ella misma, tiene buen gusto.Tomo asiento en el sofá y me recuesto en el. Mi celular suena una vez má

POV de Dante MorettiLa noche de la cena había recibido una llamada de Lucas, me tenía una de las mejores noticias.La madre de Sophía había decidido aparecer, aunque no es que ella se entregó, no. Planeaba algo más, ya que fue atrapada por mis hombres justo en la puerta de la mansión de los Ferrer, cuando se disponía a tocar el timbre.Justo ahora estoy frente a ella, y si no fuera porque ya tiene un poco más de 40 años, podría jurar que es la misma Sophía: elegante, atractiva, hermosa, y a pesar de esa edad que ilógicamente no aparenta, conserva su sensualidad intacta, su pelo es largo y onduladocomo elnde Sophía, solo que los de su madre son castañs claroy Sophíalos tiene totalmenterubio. Es evidente de dónde sacó Sophía toda su belleza, aunque, claro, nunca me interesósu madre, a pesar de su evidente atractivo. Pero algo me dice que sí a mi padre, y es suficiente para odiarlo más y a la mujer que está frente a mí. Está sentada, suje

POV DE DANTE MORETTI Siempre he sido un despiadado sin corazón, pero no voy a negar que ver a Sophía derramar esas lágrimas efímeras movió algo dentro de mí. Ella se había mantenido firme hasta ver nuevamente el rostro de su madre, aunque no en las mejores condiciones. Supongo que al creerla muerta y de la nada aperece, abrió una herida en ella. Se que tiene muchas preguntas para ella pero por ahora necesito hacer mis jugadas.El auto avanzaba en silencio, aunque el aire dentro estaba espeso. No habíamos hablado en todo el camino. Aún sostengo sus manos entre las mías, demostrando posesividad y protección disfrazada y aunque ella ha intentado safarse no la he dejado.—Que es lo que pretendes con todo esto? Cuanto tiempo piensas mantenerme así?— pregunta finalmente con una voz ligeramente firme.Giré la cabeza levemente, ella no desvío la mirada pero es evidente que siente cierto temor hacia mí aunque su terquedad no la dejará admitirlo.—Así como, Sophía?— le respondí fingiendo ino

Sentí el frío recorrer mi columna, pero no dejé que me viera vacilar. —¿De verdad crees que me asustas con tus amenazas, Dante?—respondí, mi voz estaba ligeramente calmada pero mortalmente seria. —Tienes mucho que aprender sobre a quién desafiar.Dante me acercó aún más, su respiración cálida contra mi cuello me erizaba la piel mientras susurraba con una calma tan perturbadora que me estremecía:—Sabes, Sophía, no es solo tu vida lo que está en juego. Tu madre… — inmediatamente me tense y el amplifico aun mas su sonrisa— está bajo mi control. Y si crees que puedes seguir desafiándome sin consecuencias, estás muy equivocada. Puedo hacer que sufra más de lo que imaginas, solo con un movimiento.Un nuevo escalofrío recorrió todo mi cuerpo, por un momento sentí que todo giraba, pero intenté mantener la calma, y claro que el miedo me estaba invadiendo por dentro. Mi voz salió temblorosa, pero decidida: —No te atrevas a tocarla, Dante. Si le haces algo, no te quedarás con nada para obligarme