Dentro de la bodega. Madeline, con su porte altivo y mirada gélida, observaba a los hombres de Marco, que permanecían alertas. Los pasos resonaron en la distancia, y todos giraron la vista. Antonio entró al lugar, serio y con la mandíbula tensa. A su lado, Cassandra Brenaman, que intentaba mantener la compostura, pero sus ojos delataban el miedo que sentía. Al verla, Madeline sonrió con altivez y levantó una mano, haciendo un gesto a los hombres de Marco. —Tráiganlos —ordenó con voz firme, rompiendo el silencio. Dos de los hombres de Marco desaparecieron por una puerta lateral. Cassandra, al escuchar esto, sintió que el aire le faltaba, su respiración se volvió inconstante, su corazón golpeaba con fuerza en su pecho como si quisiera salirse, pensaba que caería de rodillas perdiendo la fuerza de sus piernas. —¿Qué… qué estás haciendo….? ¿Por qué te fuiste con Marco?, habíamos negociado… y…. —reclamó Cassandra con un hilo de voz, mirando a Madeline con furia y temor. La mujer

Cassandra sintió que el mundo se detenía. ¡Las palabras de Marco eran como una daga que se clavaba en su corazón! Recordó lo que Madeline le había dicho en el camino: «No es momento de sufrir o llorar. Ya que te metiste en todo esto, solo tienes una elección: Marco o Angelo. Ahora solo tú puedes hacer algo.» Sus dedos temblaron al recordar el arma que Madeline le había dado, ahora oculta bajo su ropa. Marco se giró hacia Angelo, levantando el cuchillo con calma, disfrutando de cada segundo que lo torturaba física y mentalmente. —¿Últimas palabras, primito? —preguntó, inclinándose ligeramente hacia él. Angelo levantó la cabeza con esfuerzo y vio tras Marco a Cassandra con el arma. La voz del señor Fiorentino fue un susurro frío: —Que el infierno te consuma, Marco. Marco soltó una carcajada, pero el sonido fue interrumpido por un disparo. ¡BAM! Cassandra había sacado el arma y con las manos temblorosas, había apretado el gatillo… El impacto hizo que Marco cayera hacia

Y ahora sí… 🤩 Me complace anunciarles que la novela: "Contrato De Amante Con Mi Ex. ¡Recuperaré A Mis Gemelas!" ¡LLEGÓ A SU FINAL! 🥂🍾🥳🎊 Agradezco por el apoyo estos cuatro meses con esta historia. Por cada comentario positivo y cada crítica constructiva. Saben que siempre las leo y me tomo muy en serio sus opiniones para seguir mejorando. 🥰 También hago un agradecimiento especial a mi querida editora, que como siempre, me guía y ayuda con su profesionalismo para traerles historias de amor interesantes. 😊🌹 En esta ocasión, quise hacer una historia más intensa, más fuerte y un poco diferente a lo que habitualmente escribo. Espero les haya gustado, como a mí me gustó escribir y planearla jaja Por fin Cassandra y Angelo Fiorentino, serán felices junto a sus hijos. 💚 Finalmente, acostumbro a "premiar" a mis lectores que apoyaron bastante una historia, haciendo todos los especiales que me pidan, respecto a cualquier personaje, evento o duda que tengan. En los

⁠♡ ESPECIAL #2. ♡ Título: Nacimiento de Massimo. (Parte 2 de 2). ………………………………………………. Con cuidado, Angelo llevó a Cassandra hacia la habitación médica que habían preparado especialmente para la llegada de Massimo. En la habitación, la luz dorada de la tarde se filtraba a través de las cortinas blancas. Angelo, con el rostro lleno de amor, colocó a Cassandra cuidadosamente en la cama. Su mirada no se apartaba de ella, como si quisiera transmitirle toda la fuerza y la tranquilidad que necesitaba en ese momento. —Estoy contigo, vida mía… —le susurró, acariciando su cabello con ternura mientras ella respiraba profundamente, tratando de calmarse. Los médicos especialistas contratados por el señor Fiorentino, junto con todo el equipo médico adecuado, llegaron poco después. Angelo se encargó de recibirlos y explicarles la situación, mientras Cassandra trataba de adaptarse al ritmo de las contracciones que comenzaban a intensificarse cada vez más. —¡¡AAAAAHHH!! ¡DUELEE! —gr

⁠♡ ESPECIAL #4 (Madeline parte 2 de 4). ♡ Título: El último contrato. ………………………………………………. —¡¿Por qué demonios haces esto?! ¡¿Quién te crees que eres?! —gritó Madeline, furiosa. Apenas los hombres la soltaron, avanzó con pasos decididos hacia Vittorio. Se detuvo frente a él, cruzando los brazos, sus ojos llenos de rabia y desafío. Vittorio Rossi, vestido impecablemente, no pareció inmutarse. Con una calma gélida, llevó su copa de whisky a los labios, tan indiferente como si la escena fuera un mero espectáculo para su entretenimiento. —Te lo dije. No estaba en el trato que mi hermano terminara casi muerto —respondió él fríamente. —¡ESE NO ES MI MALDITO PROBLEMA! —gritó Madeline, su voz llena de indignación y frustración—. Fue culpa de Cassandra Brenaman. Yo cumplí mi parte. ¡Soporté un maldito mes a Marco! ¡Incluso maté a un hombre! Ese dinero me pertenece. Mi libertad también. Una sonrisita se formó en los labios de Vittorio. Sus ojos verdes oscuros la recorrieron lentamente,