POV Agatha:—…así que si movemos ligeramente las proyecciones del cuarto trimestre para la división de microóptica, nos da margen con la inversión de Tanaka sin levantar sospechas inmediatas para el resto de la junta. —Charles golpeaba con un bolígrafo la superficie pulida de mi escritorio –el escritorio de papá–, con el ceño fruncido por la concentración.Había aparecido sin avisar hacía una hora, supuestamente para discutir la estrategia de NexGen, aunque su presencia siempre parecía algo más que negocios últimamente.Desde el hospital, desde que papá empezó a recuperarse… las cosas entre Charles y yo eran… complicadas. Tensas.Él actuaba como si todo estuviera bien, como si nuestra breve intimidad hubiera sellado algo permanente, pero yo seguía retrocediendo, necesitando un espacio que él parecía poco dispuesto a conceder.—Es agresivo, Charles —repliqué, reclinándome en mi silla, tratando de concentrarme en las cifras que había expuesto, no en la forma en que su rodilla rozaba oca

POV Agatha:—Lena —respondí, mi voz tensa, intentando sonar normal, profesional, muy consciente de Charles de pie rígidamente junto a la ventana, de espaldas a mí, pero irradiando tensión como un cable de alta tensión—. ¿Qué pasa? ¿Qué filtración?—Agatha —la voz de Lena era baja, urgente, despojada de su habitual calma profesional. Sonaba… tensa. Asustada—. ¿Estás sentada? ¿Estás sola?Me dio un vuelco el corazón. —No, Charles está aquí —susurré, mirando nerviosamente hacia su figura inmóvil—. ¿Por qué? Lena, ¿qué ha pasado?—Vale —Lena respiró hondo, el

POV Charles:El clic seco del teléfono al desconectarse resonó en el repentino silencio de mi despacho.Agatha se quedó helada, el color drenado de su rostro, sus ojos muy abiertos con un horror que reflejaba la sacudida de pánico puro que recorría mi propio sistema.Lena Moretti. Esa abogada entrometida y mordaz.¿Qué demonios le acababa de decir a Agatha? Algo sobre Nathan, claramente. Algo devastador, a juzgar por la reacción de Agatha.Mi mente se aceleró, calculando ángulos, evaluando daños, luchando por el control. Esto era malo. Esto podría deshacerlo todo.—Agatha, ¿qué pasa? —exig&iacu

POV Charles:La recepción minimalista y elegante del bufete Moretti era ofensivamente serena.Luz suave, tonos grises apagados. Proyectaba una imagen de competencia tranquila, de eficiencia controlada. Una imagen que no hacía nada por calmar la tempestad que rugía dentro de mí.—Sr. Campbell —me saludó la recepcionista, una joven de mirada aguda, con una cortesía profesional, aunque ligeramente recelosa—. ¿Tiene cita con la Sra. Moretti?—No —afirmé rotundamente, pasando junto a ella hacia la puerta de cristal esmerilado que llevaba el nombre de Lena Moretti—. Pero me recibirá.No me molesté en llamar. Empujé la puerta y entré.Leer más