Antes de que Carolina saliera, Kelaya le dijo espera, solo te dije que te fueras, más no que no te creía, y si es por eso que sigues llorando sin consuelo alguno, como si se te hubiera muerto alguien, descuida que yo te creo, ya que sé que no serías tan estúpida en hacer algo como esto.Gracias Kelaya le dijo Carolina y se fue con una sonrisa en sus labios, que apenas salió de la habitación, la convirtió en una mueca, mientras se decía que fácil fue convencerte.En ese mismo instante que había salido Carolina, Melany se le acercó un poco enojada a Kelaya, y le dijo, no puedo creer que le creas en esa mujer, estoy por pensar que la estupidez de tu marido es contagiosa y te la está pegando a ti ahora, ¡Uuyy, qué miedo me da estar cerca de ustedes!Y si me quedo un poco más es capaz que me vuelva una completa idiota como ustedes dos y estaba a punto de irse cuando Kelaya la detuvo y le dijo, solo le dije lo que ella quería escuchar, para que estuviera segura de que su plan surtió efecto.

Tanto Paola como Fabián se habían quedado petrificados con esa noticia, nunca se imaginaron que lo que les iba a decir Alejandro fuese tan grave y la vida de Paola estuviera en peligro ahora.Después de que se tranquilizaron un poco, el primero en reaccionar fue Fabián, el cual dijo, esa tuvo que haber sido Carolina, porque mi esposa no tiene ningún enemigo aparte de ella.Alejandro le dijo, tranquilízate y después hablemos del culpable, ya que solo quise que lo supieras, y poder contarte sobre mi plan, puesto que la persona con la que mandaron a asesinar ahora trabaja para mí.Fabián no le prestó atención a lo que Alejandro había dicho, sino que de inmediato dijo, lo que es, mi esposa y yo nos vamos de inmediato del país antes que esa loca le haga algún daño.Y se estaba levantando para salir huyendo de aquel lugar y mantener a salvo a su mujer e hijo, cuando Alejandro lo detuvo y lo hizo sentar nuevamente, mientras le decía, ya te dije que tengo un plan y vamos a atrapar al culpable

Carolina siguió hablando porque la verdad no quería que más gente se lamentara delante de ella por la partida de Paola, ni porque se hubiese muerto alguien importante para este mundo.Así que comento, creo que ese crucero recién salió en las horas de la mañana y de seguro todavía se demora un día más para llegar al primer puerto donde tiene la primera parada y si les avisamos desde ahora, no disfrutarán nada por estar pensando en lo sucedido.Kelaya que por primera vez desde que conoció a Carolina estaba de acuerdo con ella, dijo, Carolina tiene razón, además pienso que deberíamos dejarlos que disfruten de su luna de miel y cuando ya vuelvan decirle lo sucedido.En ese momento Carolina con Kelaya parecían como si se hubieran puesto de acuerdo, ya que en esta ocasión fue Carolina quien apoyó a Kelaya, puesto que ambas tenían un interés de por medio.Kelaya era porque sabía que cuando su amiga se enterase de que la supuesta muerte de Paola era solo un acto, para atrapar al culpable de s

Después del entierro de Paola, don Antonio le dijo a su hijo que se fuera a quedar en la mansión con ellos y así no estuviera solo con los recuerdos de su esposa.Pero Fabián se había negado de inmediato, mientras le decía que lo único que quería hacer era estar solo recordando a su esposa, y que esperaba que eso no se lo quitaran.Ya que esto era lo único que le quedaba de su esposa.Don Antonio no le dijo nada más, pero tampoco estaba seguro de dejarlo solo en su casa.Alejandro, al ver a sus padres tan preocupados por su hermano, le dijo: no se preocupen que Kelaya y yo nos quedaremos a cuidar a Fabián y les informaremos si algo malo llegue a suceder.Ya habían pasado tres días y Fabián se iría al siguiente día junto a su suegra y su sobrino, todos estuvieron de acuerdo con esta decisión, menos doña Elsa que a lo primero no quería que se fuera a un país donde no tenía a nadie de su familia.Pero al ver que su hijo no quiso cambiar de parecer, dijo, entonces yo también me iré a vivi

Alejandro en ese momento se había quedado estupefacto al escuchar el nombre que le decía la persona del otro lado de la línea.Era tanta su impresión que Mauricio seguía hablando, y él no le estaba prestando atención, ya que él guardaba esperanza hasta el último instante de que Carolina no fuese la persona tan malvada que siempre su esposa y todos los demás le decían que era.Pero ahora, con lo que Mauricio le había dicho y además estaba lo que él mismo había averiguado en aquel pueblo.Y por el momento no le quedaba de otra más que aceptar aquella verdad que nunca se le pasó por su mente, y la culpable de todo lo que le había sucedido era Carolina, la mujer que él tanto defendía de su hermano menor y de todos que sí vieron a su verdadero yo desde un principio.Qué estúpido había sido en confiar en una mujer como Carolina todo este tiempo, sin saber que pertenecía a la banda que le quito a su primera esposa e hijo por nacer. Pensando en esto se comenzó a darse golpes de pecho una y ot