~~~Alison.Lo cierto es que me siento anonadada por lo que acaba de decir, pero muevo mi cabeza de lado a lado.―Pues, tal parece que los analgésicos te han hecho bien, porque hasta estás desvariando―le indico, al tiempo que le coloco mejor las almohadas―trata de descansar para que tu cuerpo se recupere de la herida, pero, lo más importante es que vayas a un doctor y te haga la curación correcta, porque me parece que tienes rota una costilla―le indico, lo que le hace gracia, aparentemente, porque se muere de la risa.―Esto no es para nada grave―me responde y trata de moverse nuevamente―me di un golpe en el trabajo, pero no es nada serio y no tengo nada roto, aunque sí que los músculos en mi pecho me duelen como el demonio―asegura, al tiempo que me intenta mover otro mechón de cabello.―Pues, sí que lo es, si por casi te desmayas de dolor, tonto―le respondo y lo miro fijamente y estoy a punto de perderme en lo profundo de su mirada, así que trato de deshacerme de su hechizo―ahora, le

~~~Alison.Entonces, Georgy me mira con detenimiento.― ¿Ves? ―solamente hay una respuesta para todo eso y es que él está enamorado de ti y que está preocupado porque estás lejos de él y como te niegas a todo, te ha llevado a su casa para que te lo pienses mejor, pero como eres una verdadera terca, pues, lo rechazaste... otra vez―me dice entre molesta y divertida―a ver si te vuelve a encerrar y esta vez en un calabozo, hasta que te obligue a entrar en razón o, por lo menos, ya quisiera yo una cosa como esa―me comenta de lo más descarada y yo pongo los ojos en blanco.―Pues, te deseo que te consigas a un James en tu vida―le respondo molesta―a ver si te quedan ganas de que te hagan todo eso―le digo molesta y ella se ríe más fuerte.―Amiga, a mí no me encerrarían ni nada, porque mucho antes de eso, estaría echándole yo el lazo y que se case conmigo de una buena vez―me responde y ahora sí que me hace reír su descaro.―En serio que no tienes remedio―le digo y me voy hasta mi habitación a

~~~Alison.Tengo mi cara hundida entre mis manos, a la espera de que la luz roja de la sala de operaciones se apague y pueda ver a mi abuela ya recuperada, al tiempo de que James se encuentra en la silla más alejado de mí, con su celular en la mano y me pregunto si realmente le está poniendo atención a ese aparatejo y si no ha notado de que lo he visto mirarme de cuando en cuando.Sin embargo, no tengo ni la cara tan dura ni las ganas tan férreas, como para preguntarle nada o para que de mi boca salga otra cosa que no sea otro "gracias" sincero, por todo lo que ha hecho por ella.Y no me engaño, porque él no conoce a mi abuela Mariella de nada, ni tampoco es que por casualidad ha venido a una ciudad tan lejos de la gran ciudad a donarle nada más y nada menos que a mi abuela.Dicho de otra forma, él está aquí por mí y de eso no tengo la menor duda.Ya el doctor me había dicho que era una operación sencilla, sin embargo, es mi abuela y como ella bien lo dijo, es una señora mayor y cual

~~~Alison.Unos días más tarde, mi abuela y yo estamos listas para irnos directo a Aruba, una hermosa isla turística en el mar Caribe por lo que sé, lo cual me entusiasma mucho, porque lo único que he conocido, luego de salir de casa de mi abuela ha sido la gran ciudad, en donde solamente me he dedicado a trabajar como una esclava para poder vivir.Por cierto, el viaje es en un crucero, uno muy grande, con piscinas y hasta un centro comercial dentro, por si a alguien se le olvidó traer el vestido de baño o si se quiere llevar algún recuerdo de esta excelente experiencia para gente como yo, que me estoy pellizcando a cada minuto, a ver si me despierto de este sueño hecho realidad.Sin embargo, a mi no me interesa comprarme un peluche o una taza con el logo de la compañía de cruceros, más bien, prefiero irme directo a la piscina, en donde todo nos lo traen a los camastros con enormes sombrillas, para que el sol no nos queme, aunque, si voy a ser honesta, prefiero tostarme en mitad de l

~~~Un día antes.James.―Todo está listo, jefe―me dice Carlisle en cuanto llega a mi despacho, algo que estaba esperando―ya Alison hizo el registro en línea para irse en el crucero hasta Aruba―me indica.Al darme cuenta de que la abuela de Alison había salido bien de la operación, he mandado a uno de mis hombres para que organice la manera de que ella viaje en crucero para el Caribe, sin que se dé cuenta de que yo estoy detrás de todo eso, porque de seguro que, si me aparezco con un regalo como este, lo va a rechazar, como la maldita terca que es.Tampoco habría manera de que quiera irme con ella, lo quiera o no, solamente para verla en bikini o pueda juguetear con ella en el mar, mientras la abrazo y la beso.No, debo dejar de fantasear con ella, porque ya me ha dejado muy claro que no quiere nada conmigo y eso es una tortura para mí.―Perfecto―le respondo a mi segundo al mando, pero no es lo único que me inquieta― ¿y qué hay de Brandon, ya está listo para embarcarse, también? ―le i