Cuantas cosas pueden llegar a estar en la mente de un hombre, según la ciencia no más de una, según ellos podría llegar a decirse que nosotros los hombres solemos no pensar en más de una cosa podría ser poco probable y peligroso, ya que solemos distraernos, la verdad es que nunca he hecho algo comprado como para refutar aquella teoría, pero ahora mismo, en este instante, puedo llegar a decir que si me encuentro en un completo debate, que mis pensamientos llegan como tormentas y solo me causan un terrible dolor de cabeza, uno que no sé cómo manejar o como interpretar, he de decir que es una mierda completa, un completo desastre repito, tanto así que ahora mismo me encuentro aquí sentado en la sala de espera del hospital, mientras me debato en ir o no ir, en hablar con él o no hacerlo.En actuar como un adulto o no hacerlo, la verdad es que es muy difícil, además ¿Qué le diré? ¿Aléjate de mi mujer? Nessa es mía, qué estupidez, ella no mía, además Nessa me dejo todo en claro, yo perdí, y

Un fuerte golpe se escuchó en el lugar, Ervin se había levantado como un resorte, estaba colérico, esa elegancia, su risa petulante y su mirada llena de confianza se había agotado por completo, no había una sola pizca de aquello que mostraba al ingresar al lugar, la verdad fue que terrible, tanto así que di un respingo y observe como este observaba en dirección a Eliot y a al bogado, mientras los señalaba con una mirada extremadamente peligrosa e inicio hablar de manera entrecortada y casi gritada debido a su enojo extremo.—Tú… ustedes… ustedes están estafándome, este maldito testamento es falso, todo es falso, ¿quiénes creen que son para engañarme? El único dueño de esta familia, soy yo, el único dueño de todo lo que pertenece a los King, soy yo, el maldito hijo legítimo, el legítimo… no un bastardo, un simple imbécil creado en una noche de calentura…—Ervin, pero ¿Qué carajos te ocurre? El estamento ya está estipulado, ya basta, tu hermano no ha hecho nada, no tienes por qué…—Tú c

—Si prestas mucha atención, ellas comen todo, solo tienes que ofrecerle comida y listo, ya está, nada de problemas, la verdad es que no veo el lío, pero porque ese maldito aparto, no me hace caso, ¿Por qué no hace lo que le ordeno cuando se lo ordeno?—observo a Senga con una pequeña sonrisa en mis labios, mientras ella parece de verdad muy irritada últimamente, ya que su teléfono, aquel que no ha sabido como anejar, la tiene en un punto en el que por poco pierde la cabeza, un poco más de lo que ya está.—No veo el problema, solo tienes… tienes mensajes nuevos, aquí hay uno y aquí… hay otro…— noté el nombre en la pantalla y un gran pinchazo llego a mi pecho, Ancok había decidido no hablarme por un tiempo, para ser exacta había dejado de hablarme desde que me convertí en la cara principal de los periódicos, ya que todos habían indicado sobre mi regreso en la relación con Eliot King, algo que era más que una gran mentira.Y aunque Eliot y yo lo hemos negado a cada que un periodista nos p

—no creas que con esto te libraras, no estés seguro para nada, no tienes idea lo que problemático y mortal que puedo ser, no tienes idea de cómo arruinarte tu maldita carrera detective…—me hubiese gustado que nuestro viaje había sido silencioso y tenso, pero no es así, Eliot no dejaba de hablar una y otra vez, sobre todo, no deja de abarcar el tema y no deja de mostrarse como un verdadero dolor no el trasero. Aunque de cierta forma lo entiendo, de cierta forma logro comprender que se niegue a mostrarme siquiera un poco de compresión, de un trato moderado, pues si lo hacemos significa que ya no habrá nada que no una que Nessa, aquella por la que por así decirlo ya no está y eso es imposible, yo me niego a creerlo, yo estoy convencido de que mi amada Nessa no pudo haberle ocurrido nada, absolutamente nada, y algo me dice que aquel que va a mi lado le ocurre lo mismo.—no entiendo ¿Por qué hacerle daño Ness? ¿Por qué no ir directamente hacia ti? Todo es tu culpa, todo es tu maldita culpa

Escucho palabras afuera de la tártrica habitación en la que he estado encerrada por días inténtelo levantarme, pero la verdad no puedo, me duele, me duele mucho, no puedo soportar más el hecho de que me golpeen, que me hagan tanto daño, su frase favorita es “ya te doblegaras” me he negado a grabar videos de rescates, me he negado a hacer cartas, me han roto tres dedos y creo que tengo fracturada una costilla, además del hecho que no dejaban de llamarme alisa, alisa esto, alisa lo otro, mientras yo sigo perdida completamente perdida, no entiendo por qué me llaman de aquella manera, no entiendo por qué siguen atacándome una y otra vez la verdad no lo comprendo Pero lo único que si tengo entendido es que Thara y esa chica extraña están inmiscuidas en esto.Thara parece estar un poco más delicada con el tema, parece incluso que teme lo que hace Davina conmigo y sus hombres, el hecho de que torturen como si no fuese más que un animal, el hecho de que traten de aquella forma de cierta forma