Jacob SmirnoffMiamiYa no sabía ni que terreno estaba pisando con mi padre, estaba reaccionando mal a todo esto, debía calmarse un poco, o le podría dar algo, su histeria no se la aguantaba nadie. Salí del ascensor y él se encontraba esperándome en el auto, ya hasta tenía el motor encendido. No sé cuál es su desesperación, Boggi va a aparecer cuando le dé su gana, ya era mayor de edad, no tenía que estar cuidándolo, como si fuera un chiquillo.–Tienes que pensar, Jacob, a dónde pudo ir tu hermano – Seguía con lo mismo.Cuando ya me puse el cinturón de seguridad, arrancó como un poseso, esperaba que llegáramos con bien, hacía donde se dirigía. No dije nada para no errarle.–Pues, no tengo idea, papá, debe estar en alta mar, me dijiste que se llevó un yate.Esperaba que en estos momentos no los encontráramos, así como veía a mi padre de alterado, era mejor evitar cualquier acercamiento, pues mi hermano ha de estar con Dulce, y no platicando precisamente.–Tenemos que pasar por tu madre

Jen SaldañaMiamiEsperé un poco de tiempo en el departamento de mi amado Jake, mientras me aseguraba que ni él, ni el señor Mijaíl volvieran, no quería de ninguna manera el tener que encontrarme con ese señor quién con toda seguridad yo sabía que me odiaba. Me metía a dar un baño refrescante, pues lo necesitaba después de tanta acción de la noche y de hoy, me vestí y salí del baño.Cuando pasó un tiempo considerable, salí del departamento de Jake y me fui directo a la clínica veterinaria, para relevar a Emiliano y ayudarle antes de que se fuera a dormir un rato, con la revisión matutina de Konan. Al llegar a la clínica, me sorprendí de encontrarme ahí con Dulce quién no estaba sola, estaba con Boggi y ya estaban en sus labores, bueno Boggi la ayudaba.–Hola Jen – Dulce me saludó – ¿Apenas saliste del departamento de Jacob? No sabes todo lo que Boggi y yo, hemos pasado.No lo sabía, porque se largaron y nos habían dejado a Jake y a mí en tremendo lío, bueno más a Jake que a mí.–Hola

Jacob SmirnoffMiamiEstuvimos platicando las cuñadas de Jen y yo, una vez que entré a la clínica. Revisé a Konan y vi que estaba bastante bien, Jen por supuesto ya lo había revisado, pero era importante que yo lo hiciera también por haber sido yo el médico que lo operó, me gustaba que se llevaran a cabo las normas, pues el doctor que operaba era el que le podía dar la salida al paciente. –Jake, estoy impresionada – Me halagó Jen – Konan está excelente, a pesar de esa cirugía tan complicada.Era una de las operaciones más complicadas, que había realizado, siempre era un riesgo para los animales, pues luego venía la recuperación y era un poco dolorosa, y las terapias solían ser bastante complicadas.–Sí, se ve excelente. Yo mismo esperaba que, estuviera decaído durante su recuperación.Creo que dentro de lo que cabía, Konan estaba soportando la campana de aislamiento muy bien, porque en cuanto le empezaran a molestar los puntos debían estar muy atentos a que no se hiciera daño el mism

Jacob SmirnoffMiamiJen me hizo reír a morir con ese comentario, tenía la razón yo no podía seguir enojado o alterado por algo de lo que yo, no era para nada culpable. Todo era culpa de Mijaíl de cómo se ponía por no saber aceptar que nosotros, sus hijos, ya habíamos crecido y teníamos derecho de hacer nuestras vidas como mejor nos pareciera, así como él ya había hecho la suya.–Jake, mi amor. Está sonando tu teléfono – Jen se percató antes que yo – Sentí que algo vibró y yo dejé el mío en la clínica.–Gracias mi amor, no me di cuenta.Pensaba en no contestar a nadie, no quería ver en la pantalla de mi teléfono el nombre de Mijaíl, pues me imaginaba que era para seguir culpándome de todo lo que le pasaba, pero para mi sorpresa y gusto no era él, era Sasha mi hermana y de inmediato le respondí.–Hola hermanita ¿Cómo estás?–Jake, tienes que venir urgentemente a la casa – Mi hermana estaba llorando – Tuve miedo de que no me contestaras, acá en la casa, las cosas están mal aquí.Mi herm

Jen SaldañaMiamiQué bueno que a la tía Chayo, le haya caído bien mi cuñado, era un punto más a su favor, porque ya lo habían aceptado los dos, tanto mi tío Porfirio como ella.– ¿Qué tanto chismean ustedes dos? – Dijo Dulce a nuestras espaldas – Apenas me ausento un poco y ya están hablando de mí.–Le decía a Jen, que ¿Quién es el chico ese que has traído? Pero descuida que ya sé por qué se me hizo bien guapo, si es hermano del bombón de Jacob, ahora sí las felicito a las dos, escogieron muy bien.La tía Chayo, bien que reconoció a Boggi, como el hermano de Jake, pues el día de mi casi boda con Emiliano, todos estuvieron atentos a lo que pasó justo antes de que pasara el desastre. No fue para nadie desapercibida la presencia de Boggi.–Mamá, que bueno que te ha gustado Boggi y que también le ha gustado a mi papá – Dijo Dulce un tanto temerosa – Es que, me lo he robado.–No digas tonterías Dulce, ¿Cómo que te lo has robado?, ¿De dónde te lo has robado? – Le preguntó la tía Chayo.Bue