El oleaje golpeaba con fuerza contra las rocas del risco, el pequeño cuerpo de Halia apenas puede mantenerse a flote con el peso muerto a cuestas, por fortuna para ella el cuerpo inerte no le daba pelea, sin embargo, estaba atrapa en las fuertes corrientes.El mar y el viento no le están dando tregua. Observa con horror como el agua se tiñe de sangre, ella comprende que es de la persona que trata de salvar.Hace todos sus esfuerzos para mantenerlo a flote, si estuviera sola se sumergiría para salir en las aguas más mansas, pero teme hacerlo por el hombre desvanecido; el hecho de encontrarse inconsciente aumentaba la posibilidad de que sus pulmones se llenarán de agua si se sumergía.Sus músculos para ese momento están extremadamente agotados tratando de mantenerlo en la superficie, le preocupa no alcanzar la corrientes de deriva litoral adecuada para salir a zona segura, utiliza toda sus sentidos para encontrarla.- ¡Ahí está! Se dice a sí misma, tratar de alcanzarla, una ola la devue

Volviendo al consejo portuario, Mónica va escoltada con Marcus y otros hombres, la seguridad de Marcus le produce a Mónica un poco de tranquila.- «Ahora sé cómo se siente Halia todo el tiempo, pobre de mi amiga»- Suspira Mónica. Marcus la observa de reojo.-Pronto se sentirá mejor señorita- Le dice Marcus- ¡Hee! ¡Ha! ¿Por qué lo dice? – Le cuestiona mirándolo a los ojos.-Cuando este en el chalet estará con Halia y bajo la protección de Alonso- Mónica no puede evitar sonrojarse al escuchar su nombre. Hasta ahora, cae en cuenta que verá a Alonso todos los días cuando este el chalet.Marcus no puede evitar una pequeña sonrisa, le parece adorable la timidez e inocencia de Mónica.Cuando llega al piso inferior, Mónica se sorprende de ver a hombres de la milicia alrededor de un Rolls Royce, en el cual suben a una chica como de su compostura. El gran movimiento la hace sentir un agujero en su estómago, provocando palidez en su rostro. Marcus lo nota y de inmediato se pone de frente a ella

Volviendo a la sala de secciones de la compañía Lombardo.-Chiara cálmate ¿De qué hablas? - Interviene Laura angustiada-Kano se llevó a Liam al centro de los Gyámok, después de golpearlo, lo dejaron cerca del hospital periférico. Lo peor de todo es que no tiene ningún reporte de que haya llegado al hospital.- ¿Qué le hiciste, Kano? ¿Cómo te atreviste? - Le alza la voz Chiara. La angustia está reflejada en su rostro.- ¡Cálmate mujer! Debe haber ido al hospital de Julián, a como es, de seguro vio muy poca cosa el hospital periférico- Dice Kano más para tranquilizarse él, que para tranquilizar a Chiara.¿Kano que has…. Qué has hecho? - Dice Marcelo con mucha dificultad para respirar. A pesar de que Halia lo había sanado todavía su corazón esta débil y en proceso de recuperación.-Tranquilízate abuelo, te juró que traeré a tu apreciado nieto- Le dice con un toque de celos.-Pablo ¡Por favor! Ayúdame a llevarlo al hospital- Laura nota que su esposo corría peligro- ¡Mujer… No me voy… Ha

Volviendo al Chalet Halia vuelve a ver a Mónica apenas escucha la voz de Alonso, nota a su amiga mirarlo como siempre, pero nota que de la nada vuelve a ver a Marcus. Es como si hablarán con la mirada. - «Esto está raro»- Piensa Halia y volviendo a ver Alonso le dice - ¿Pudiste conseguir los ostiones? - La pregunta pone la atención nuevamente en Alonso. -Por supuesto jefa, no fue nada difícil- Dice caminado hacia la cocina, donde está Marcus con las bolsas, al pasar a la par de Mónica le dice- ¡Bienvenida señorita Valverde! - ¡Gracias Alonso! - Le dice Mónica tímida. - ¿Por qué no estabas en la casa? - Le interroga Marcus - ¿Dónde está el resto de la seguridad? - El hombre cariñoso, amable había desaparecido. Incluso Mónica se sintió cohibida con el aura del hombre. -Es culpa mía, Marcus- Le interrumpe Halia- Ya no quiero vivir como una prisionera, al menos debería de darme eso- Alega con firmeza. Marcus fija la mirada en Halia. De inmediato interviene Alonso. -Marcus no están

Volviendo al piso inferior del chalet. Mónica se apresura en llegar a la cocina, el comentario de Alonso la desbalanceó. Trata de calmarse más por orgullo que por vergüenza. -No le hagas caso- Halia que la conoce bien, le dice para animarla -Es que Marcus logra estresarlo, es sumamente estricto con ellos- Le dice justificando el comportamiento de Alonso. - No te preocupes estoy bien, créeme- Le dice Mónica tratando de restarle importancia. -Hace muchos años cuando nos reunieron a todos como una familia. Bàba nos dijo que nosotros podíamos escoger nuestro futuro y que el nos daría las armas para hacerlo, que cada uno lograría de acuerdo con sus capacidades- Le cuenta Halia. Mónica mientras tanto le pone atención algo cabizbaja. -Imagínate la expectativas de nosotros, que no teníamos nada, estábamos más que contentos por tener techo, comida, deseábamos agradarle a Bàba… Cuando nos informaron que el mejor sería la mano derecha, todos absolutamente todos nos reventamos para alcanzar es