¿Saben qué es lo eor que puden hacer cuando no estás en tus cinco sentidos? Bueno, por si no se lo imaginan, yo se los diré. 

Fui corriendo a donde estaba Carmen, no le iba a decir a ella, tenía miedo de su reacción, pero iba a regresar ahí ya que estaba con Marisse y con ella es con la que necesita habla, ella podría ayudarme. 

-Hola Carmen, ¿de casualidad has visto a Marisse? 

-Está adentro con Luis, pero tienes que esperear para entrar. 

-Muchas gracias, de verdad. 

Ya que tenía que esperar un rato para entrar decidí ir a casa para poder cambiarme de ropa. 

Afuera había un carro que no reconocí y eso no me daba buena espina. 

Entre para ver de quien se trataba y había una señoa en la sala aparentemente llorando. 

-Disculpe, ¿está usted bien? 

-Oh, disculpa, si, está todo bien -dijo mientras se limpiaba las lágrimas que aún quedaban en su rostro- ¿podrías decirle al señor Bennet q