Capítulo 68
Daniel
Lo suspendido con Anastasia fue algo desagradable que ni siquiera quiero recuperar, sobre todo porque fue capaz de hacer semejante numerito frente a mí. Ni siquiera le importa que yo le dijera que no lo hiciera y cuando perdí la paciencia debido a sus oídos sordos, la saqué de mi oficina. El resto ya lo han visto ustedes.
Ver a mi mujer comportándose como toda una fiera me hizo sentirme orgulloso de ella, sobre todo por defender lo que es suyo que soy yo y por no dejarse de nadie.
– No sabía que eras toda una fiera – le digo una vez estábamos los dos en el ascensor, subiendo hasta el último piso para pasar el mal trago.
– Hace tiempo que no peleaba de esa manera con alguien, creo que la última vez fue cuando descubrí a la amante del que era mi prometido y dada la gana casualidad m. En esa ocasión le hice lo mismo a aquella chica que a la loca de tu ex.
– ¿Entonces es tu hobby personal sacar a las mujeres del cabello desnudas de cualquier lugar? – pregunto en modo