Rosa miró a Carlos con cierto disgusto:

—¿Hay algún problema?

Desde que contestó esa llamada estaba alterado. Seguramente había pasado algo grave.

Fátima también lo miró. Cuando él estaba hablando mencionó el nombre de Silvia, y ahora ella ya tenía un reflejo condicionado a ese nombre.

—Silvia desapareció —dijo Carlos.

Recordando las palabras de Marcos hace rato, instintivamente miró a Fátima:

—¿Sabes dónde está?

—¡Carlos! ¿Qué quieres decir con esa pregunta? ¿Cómo voy a saber dónde está? —Fátima puso cara fría.

Carlos sonrió disculpándose:

—Leticia hizo algo malo antes, tengo miedo de que cometa el mismo error otra vez.

Fátima lo miró con disgusto. Al recibir la señal de Rosa con la mirada, calmó sus emociones:

—Carlos, me enojé hace rato porque me acusaste sin pensarlo. Sabes cómo soy, ¿cómo podría hacer algo así? Además, hoy estuve contigo todo el tiempo, no me alejé de tu lado, definitivamente no fui yo. Y ahora ya se rumora la actitud de los Somoza hacia Daniel. Marcos no está de