38. ¿Erwan has bebido?
— Ahora haz lo que te diré — dijo Alexa —Tatiana, es muy importante que quedes embarazada lo antes posible y para eso debes usar las armas que tienes como mujer.
Observaba por última vez a su hija con ese conjunto de lencería francesa que le había comprado. Perfectamente arreglada y maquillada recién salida del salón de belleza. Esperaba que la tarde que habían pasado dándole indicaciones diera sus frutos y pronto pudiera celebrarse la abuela.
A Tatiana no le hacía ilusión alguna acostarse con Erwan ya, lo había intentado todo y solo había conseguido su desprecio, la posibilidad de conseguir otra negativa solo hacía que quisiera huir, pero si madre tenía razón y tal vez no fue capaz de usar correctamente las armas que la naturaleza le había dado, al fin y al cabo cuando se acostó con Sergey él parecía encantado con su cuerpo.
Sus esperanzas se fueron derrumbando a medida que la noche llegaba y después la madrugada, quedándose dormida con ese conjunto de lencería y sus esperanzas rota