CAPÍTULO 14
Dos días después, Andrea y Cameron se instalaron en la mansión Kingston. Nada más entraron, Amara corrió hacia su hermana para rodearla en un cálido abrazo.
―¡Hermana! ―susurro conteniendo las lágrimas y llenándola de besos.
―Hola, Amara ―dijo Andrea tratando de apartarla ―Me estás ah